Será para la mayoría de los programas vigentes que, en total, incluyen unas 60 mil casas. Hasta ahora tenían cuotas fijas absolutamente desactualizadas. Luego de la implementación de un plan de pagos, la recaudación creció hasta 300%. Subieron la cuota mínima a $200 para unos 15 mil beneficiarios morosos que pagaban entre 50 y 150 pesos mensuales
El Gobierno provincial dispuso incrementar a 200 pesos la cuota mínima para beneficiarios de planes de la Dirección de Vivienda, que pagaban entre 50 y 150 pesos por mes, al tiempo que trabaja en modificaciones al régimen vigente que, entre otros puntos, incluiría ajustes en los pagos atados a la variación general de los salarios. Estos datos fueron confirmados a Comercio y Justicia por el ministro de Vivienda, Arquitectura y Obras Viales, José García.
Los cambios en análisis se implementarán una vez que venza el plan de pagos dispuesto oportunamente por la repartición, que ahora se prorrogó hasta el 14 de octubre próximo.
Según indicó García, hay unas 60 mil viviendas en cabeza de esa repartición, de las cuales buena parte corresponde al ex Instituto Provincial de la Vivienda (IPV).
Concretamente, son casas construidas en la década del 90 otorgadas a beneficiarios a 30 años de plazo con tasa fija. Esa modalidad de cálculo determinó que miles de adjudicatarios paguen hoy cuotas de entre 50 y 150 pesos. De hecho, hay unos 15 mil en esa condición que son deudores de la Provincia. En tanto, hay otros 5 mil beneficiarios que pagan cuotas por encima de 150 pesos mensuales y que también se encuentran en mora.
El plan de pagos permite cancelar deudas y adelantar pagos al valor de la cuota vigente, que en rigor ayer se ajustó a 200 pesos la mínima.
García aclaró que esa situación se mantendrá hasta el 14 de octubre, fecha cuando se modificarán las condiciones para la mayoría de los planes.
En la resolución conocida ayer que prorrogó el plan de regularización y fijó un nuevo piso para la cuota mínima, el Gobierno dejó abierta la puerta para modificar las condiciones vigentes.
En ese marco, García consideró que, a los efectos de preservar el valor en términos constantes de las cuotas, se trabaja en un esquema de ajuste a futuro.
Según trascendió, la idea es que esa readecuación, que será semestral o anual, siga un índice de variación salarial, en principio el medido por el Indec. De esta forma, las cuotas conservarán el valor real más allá del desfase que tiene la mayoría en función de las condiciones originales a que fueron pactadas.
Justamente, ese cambio no es un dato menor: podría generar el inicio de demandas por parte de los adjudicatarios por el quiebre de las condiciones contractuales de los préstamos, muchos a 30 años de plazo. Por lo demás, la Provincia estudia un nuevo ajuste de la cuota mínima desde octubre, luego de subirla a 200 pesos.
En ese sentido, García evitó cualquier precisión sobre ese punto.
En todo caso, la estrategia es que la recaudación por el recupero de cuotas de los diferentes planes de vivienda en cabeza de esa dependencia se utilice para financiar nuevos planes habitacionales, tal el objeto de la Dirección de Vivienda, que además recibe fondos nacionales del Fonavi, una suerte de coparticipación en materia de vivienda.
Previo a la puesta en marcha del plan de pago, a mediados de agosto, la Provincia recaudaba unos 7 millones de pesos mensuales por el pago de cuotas de los diferentes planes.
Luego de la puesta en marcha del régimen de regularización, la recaudación creció hasta $30 millones por mes, ritmo que se mantendría al menos hasta octubre inclusive.
Según indicó el funcionario, de los morosos ya mencionados, hubo 4 mil que cancelaron las deudas, mientras que otro número similar comenzó a pagar después de haber abandonado esa conducta hace tiempo.
Los recursos recaudados se utilizarán, en lo inmediato, para afrontar el pago de los terrenos del programa LoTengo que implementó el Gobierno tiempo atrás, indicó García.
Viviendas nuevas
En tanto, ministro evitó avanzar respecto a la implementación de un nuevo plan habilitacional para sectores medios y bajos, que contempla la edificación de 8 mil unidades. Según trascendió, el anuncio oficial sobre este tema se concretaría entre septiembre y octubre.
García dijo que, por ahora, su dependencia está avocada a avanzar en el programa LoTengo.
La posibilidad de reflotar planes de vivienda fue anticipada por este medio a comienzos de julio pasado. Concretamente, la intención es levantar 8 mil unidades hasta 2019, con un presupuesto estimado en $4.800 millones, la mayor parte de los cuales será aportada por el Gobierno nacional.
Las unidades, que serán de 55 m2 cubiertos, forman parte del denominado Plan Federal lanzado por el presidente Macri en abril pasado, que contempla 120 mil casas en todo el país durante los cuatro años de su mandato. Se trata de viviendas para clase “media baja”, cuya asignación se realizará por sorteo luego de un empadronamiento cuyos detalles aún no trascendieron.
La idea es que ese programa sea complementario del LoTengo, hoy en plena ejecución.
La deuda con la Dirección de Vivienda por los diferentes planes vigentes ronda $200 millones. La cifra, en caso de que se recuperare en su totalidad, apenas alcanza para construir unas 330 unidades, cantidad marginal respecto a las necesidades habitacionales de la provincia.