ESCUCHARLuego de recibir listas con un descenso “leve” en los precios de los alimentos, en la primera semana de octubre los supermercadistas advierten de “fuertes” subas en las nuevas listas. Durante septiembre, la inflación medida por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) fue de 6,2%; y la de los alimentos fue de 6,7 puntos porcentuales.
Ahora, según pudo averiguar Comercio y Justicia, el comportamiento del precio de los alimentos daría un salto que borraría la leve baja mensual de septiembre. La Federación Argentina de Supermercados y Autoservicios (FASA) anticipó a este medio que, en promedio, las subas rondan 7,5% a una semana de que octubre concluya. De lo anterior se desprende que, de no revertir la tendencia en la última semana, las subas de los comestibles serían tan pronunciadas como las registradas en agosto.
La FASA, que preside Víctor Palpacelli, señala que, nuevamente, los alimentos frescos llevan la delantera al subir más que el promedio de los incrementos. Asimismo, se registran subas superiores a la media también en las yerbas. Mientras que los artículos de almacén, claves en el consumo masivo, estarían dentro del promedio general aunque, al tratarse de un segmento tan amplio como variado, las subas también son heterogéneas.
Con todo, los supermercadistas aducen una disminución de unidades vendidas en sus canales de comercialización de 4,5% en lo que va del mes. Vale aclarar que las ventas acumuladas a septiembre mostraban signo positivo, pero la cámara que representa al comercio de productos de consumo masivo esperaba cerrar el año con una merma de punta a punta.
Todo parece indicar que en octubre el precio de los alimentos terminará por arriba del promedio de las subas totales, en línea con lo que viene ocurriendo en donde acumulan 69% de subas, poco más de tres puntos porcentuales superior al nivel general. Cuánto repercutirá la suba de los alimentos y bebidas en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) es la pregunta del millón.
En el equipo económico del Gobierno esperan que la inflación termine en línea con la estimada por el sector privado en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central; es decir, cerca de 6,2% mensual. Sin embargo, una mayor aceleración del ritmo de las microdevaluaciones pone en duda los deseos del equipo económico.
