El gasto de capital al primer cuatrimestre llegó a $9.771,6 millones. Sólo en abril subió 301,5% respecto a 2017. El ritmo de obra aún no sentía el impacto de la incipiente crisis. Con esa dinámica de las erogaciones, el resultado financiero cayó 13,5% en la comparación interanual
El resultado financiero de la Administración Pública no financiera de la Provincia de Córdoba cerró el primer trimestre con un saldo de 3.754,8 millones de pesos, 13,5 por ciento por debajo del registrado en igual período del año pasado.
La baja quiebra así una tendencia creciente que exhibía esa cuenta mes a mes y pone una luz de alerta respecto a las cuentas públicas provinciales.
No obstante, la caída en el resultado financiero tiene su explicación en el sostenido aumento de los gastos de capital, entre ellos la inversión real directa que, al menos hasta abril, lejos estaba de mostrar una desaceleración en línea con la situación económica y merma de los ingresos fiscales que sí se percibió ya en mayo, según los diferentes indicadores.
Efectivamente, de acuerdo con datos oficiales informados por la Provincial, los gastos de capital del consolidado de la Administración pública que incluye la Agencia Córdoba Inversión y Financiamiento (ACIF) llegaron a 9.771,6 millones de pesos, 210,5 por ciento por encima de un año atrás.
En tanto, sólo en abril, esas erogaciones fueron de 3.554,6 millones de pesos, 301,5 por ciento extra con relación al año pasado.
La suba llama la atención toda vez que el año pasado fue “electoral”, cuando habitualmente crece fuertemente la inversión en obras. Sin embargo, con una base alta de comparación, este año esas erogaciones siguen aumentando de manera contundente.
Se descuenta que en el segundo semestre habrá una clara desaceleración si no una baja interanual de esas inversiones, a tenor de una situación que muestra, por ejemplo, que la recaudación propia comenzó a mostrar números en rojo en términos reales por primera vez desde hace años.
Pero más allá de las proyecciones a futuro, el dato concreto es que hasta abril la inversión en obras no mostraba aún signo alguno de merma.
Ese esfuerzo se sustentó en un ahorro corriente que para el caso de la Administración Central llegó a 15.764,2 millones de pesos, 53,04 por ciento superior a 2017.
Ese superávit llegó gracias a ingresos corrientes por 53.066 millones de pesos, 34,2 por ciento superiores, y gastos corrientes por 37.301,7 millones de pesos, 27,6 por ciento mayores a los del año inmediato anterior.
Dentro de ese último rubro, el gasto en personal fue de 20.487,1 millones de pesos, 22,2 por ciento superior al de 2017.
La suba hasta entonces se ubicaba levemente por debajo de la inflación acumulada en el mismo período.
Respecto de los ingresos de capital, fueron de sólo 2.298,4 millones de pesos para el consolidado de la Administración pública.
Por su parte, los gastos de capital superaron 9.771,6 millones de pesos, dato ya consignado en detalle.
De esta forma, los ingresos totales consolidados llegaron a 64.757,9 millones de pesos, 35,6 por ciento por encima de 2017.
En tanto, los gastos totales fueron de 61.003,1 millones de pesos, 40,5 por ciento mayores al año anterior.
La mayor suba del gasto respecto a los ingresos, si bien explicada por la inversión en obras, pone algún signo de alerta respecto a la evolución de los números.
Esa ecuación determinó al fin que el resultado financiero consolidado fuera de 3.754,8 millones de pesos, 13,5 por ciento menor que el acumulado entre enero y abril de 2017.
La caída obedece al rojo financiero que acumuló ACIF en ese período, que fue de 4.698,03 millones de pesos y que se compensó con el superávit de 8.393 millones de pesos de la Administración Central, esta última cifra 56 por ciento mayor que la registrada en el año anterior.
La Caja, otra vez el problema
Parte del aumento que mostraron los gastos totales respecto a los ingresos se debe además de a las erogaciones en obras, a los números que mostró la Caja de Jubilaciones provincial.
Con déficit crónico, ésta cerró abril con ingresos corrientes por 9.311,7 millones de pesos y gastos corrientes por 12.262,8 millones de pesos.
El rojo previsional acumuló sólo en los primeros cuatro meses del año 2.951,1 millones de pesos.
El punto es que ese déficit debería ser cubierto al menos en parte por el Gobierno nacional. Sin embargo, al menos hasta ayer, no había aún novedades respecto a los fondos que la Nación girará este año.
Es que si bien la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) envía todos los meses 171 millones de pesos a cuenta de los fondos que acordará girar este año, esos recursos lejos están de cubrir el rojo. De hecho, hasta abril sólo se habían enviado 684 millones de pesos, apenas una quinta parte del quebranto que mostró la Caja cordobesa.
En ese marco, hay preocupación por la demora de la Anses en terminar de cerrar el acuerdo con Córdoba para 2018.
Fuentes consultadas por Comercio y Justicia admitieron que siguen los cruces de información entre las partes pero que aún no hay fecha cierta para acordar, aunque sería inminente.
Por lo pronto, el atraso en los envíos tiene un costo financiero para la Provincia que, para este año, reclama unos 6 mil millones de pesos para afrontar el rojo de la Caja de Jubilaciones.
El Gobierno provincial informó que el puente sobre el río Suquía que vinculará la zona de Los Carolinos -noroeste de la ciudad-quedará habilitado en agosto. Ayer se procedió al emplazamiento de la estructura metálica, clave para la obra.