Las acciones y los bonos argentinos profundizaron sus pérdidas ayer martes en medio de las dudas de los inversores y a la espera del esperado nuevo acuerdo entre Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En ese contexto, el S&P Merval en dólares se derrumbó a su menor nivel en tres meses.
En el segmento de la renta variable, el panel líder de BYMA cedió 4,6% a 2.280.239 puntos, mientras que, medido en dólares (CCL), se hundió 5,4% a 1.911 puntos, mínimos desde mediados de noviembre pasado.
Así, las acciones que más cayeron fueron las del sector financiero: Banco BBVA se desplomó 7,2%, Grupo Financiero Galicia (6,5%), Banco Supervielle (6,4%) y Banco Macro, (6,2%).
En Wall Street, por su parte, los ADR operaron con bajas de hasta 7,5%, encabezadas por BBVA, seguida de Grupo Financiero Galicia (-7,4%), Banco Macro (-6,7%) y Telecom (-6,7%).
El propio presidente Javier Milei había dicho el lunes durante una entrevista televisiva que “sólo le falta el moño” al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), añadiendo que “incluirá fondos frescos” para capitalizar al Banco Central de la República Argentina (BCRA), sin dar más detalles.
“Hay un fuerte ajuste del mercado, por un lado por ganancias contra el récord (de precios) reciente, y por otro, el contexto externo es adverso con los nuevos aranceles impuestos por (Donald) Trump” en Estados Unidos, sostuvo un analista del privado Banco Macro.
Para Leonardo Chialva, socio director de Delphos Investment, hay cierto “ruido” en el mercado, por obra de los hedge funds (fondos de cobertura) brasileños, “moviendo las cotizaciones de ambos lados”.
“Creemos que puede ser una sana corrección tras el impresionante rally de los activos argentinos en 2024, aunque seguimos viendo factores a monitorear”, dijo Juan Franco, economista jefe del Grupo SBS. “Destacamos aquí principalmente al factor cambiario, con un tipo de cambio real que sigue apreciándose y tiene consecuencias sobre cuentas externas. Además, habrá que seguir de cerca las expectativas de mercado que, si bien hoy son favorables en el sentido que no se descuenta una devaluación, podrían verse influidas eventualmente por la volatilidad externa”, acotó.
Junto al compromiso del Gobierno de no devaluar el peso, el dólar mayorista cotizó equilibrado a $1.055,75, con un blue con leve alza a $1.210, lo que marcaba una brecha del 14,5%.
En el segmento de renta fija, por su parte, los bonos en dólares profundizaron su corrección, y el riesgo país volvió a subir.
Los títulos en moneda dura cayeron hasta dos por ciento, con bajas encabezadas por el Bonar 2041, seguido del Global 2046 (-1,7%), el Global 2041 (-1,5%), Global 2035 (-1,4%) y el Bonar 2038 (-1,3%).
Por su parte, el riesgo país, elaborado por el banco estadounidense JP.Morgan, subió 25 unidades a 705 puntos básicos, niveles similares a los anotados a mitad de diciembre pasado.
Ante la falta de catalizadores inmediatos, la atención del mercado se centró en la próxima licitación de deuda que realizará el Tesoro hoy miércoles y el dato de inflación que el Indec revelará mañana jueves.