La Argentina deberá pagarle 405 millones de dólares al grupo francés Suez por la ruptura del contrato de concesión para la provisión de agua potable y cloacas, según resolvió el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI) ante el cual la firma solicitó un resarcimiento de 1.200 millones de dólares.
La compañía gala fue reemplazada por la estatal AYSA desde el 2006 y acudió a ese tribunal, que resuelve controversias internacionales en materia de inversiones dependiente del Banco Mundial, por la ruptura del contrato de concesión para la provisión de agua potable y cloacas a la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense a través de Aguas Argentinas.