Las estaciones de servicio alertaron ayer que unas mil pymes propietarias de bocas de combustibles sin bandera están sufriendo desabastecimiento de combustible a partir del congelamiento de precios, mientras que las vinculadas a las petroleras enfrentan cupos que limitan sus ventas.
Así se planteó en la reunión nacional de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha), donde una veintena de las entidades que agrupan a las estaciones de todo el país analizaron los problemas del sector de la comercialización de combustibles.
“Cuando se anunció el congelamiento de precios pensamos que la medida iba a traer primero un alivio al bolsillo de los consumidores y un incremento de las ventas que a dos meses de la medida nunca se registró”, dijo el presidente de Cecha, Gabriel Bornoroni.
Por el contrario, el seguimiento de la entidad sobre el nivel de ventas reflejó en agosto una caída en todos los productos, y se anticipa que lo mismo ocurrirá cuando se conozcan las cifras de septiembre.
“Congelamiento, cupo y desabastecimiento es la fórmula perfecta para que las estaciones de servicio estén en crisis en todo el país”, afirmó el directivo.