En octubre el Banco Central de la República Argentina (BCRA) convalidó una expansión de la base monetaria de casi $200.000 millones, lo que representó un crecimiento de 5% mensual y 43% interanual. Es prácticamente el mismo monto que absorbió entre agosto y septiembre. De esta manera, un mes después del “dólar soja”, el ente monetario repitió conductas, en un contexto de caída de la demanda de dinero.
¿Cuáles fueron los factores que explican la emisión del mes pasado? En primer lugar se destaca el accionar del BCRA, presidido por Miguel Pesce, que mediante el pago de los intereses de la descomunal deuda remunerada acumulada emitió cerca de $439.000 millones; pero también, vía las intervenciones, principalmente en el mercado de bonos y del dólar futuro, hay una válvula de escape de la emisión.
El mes pasado, la compra de bonos soberanos en pesos explicaría la mayor parte de la emisión que se canaliza en el concepto “Otros”, que fue de casi $183.400 millones. De modo que entre los intereses y las compras de bonos el BCRA emitió más de $622.000 millones. ¿Qué hizo para aspirar la mayor parte de esta emisión? Como otras veces, recurrió a los únicos instrumentos disponibles para equilibrar la liquidez del sistema, las letras y los pases. Mediante letras absorbió $38.300 millones, más otros $273.000 millones vía pases. Además, el mes pasado el sector público jugó a favor ya que fue un factor contractivo en más de $43.250 millones. Esto fue posible porque, con excedente de depósitos en el BCRA, del Tesoro, éste adquirió divisas al ente monetario.
Por último, el mercado cambiario fue netamente contractivo porque el Central le vendió divisas, no sólo al Tesoro sino también al sector privado por el equivalente a $68.200 millones. De esta manera, el saldo del mes dio una expansión de $199.840 millones. En términos de los factores, el cambiario fue contractivo en $282.200 millones, el sector público fue expansivo en $170.700 millones brutos y el financiero fue expansivo en $128.000 millones, más los $183.400 millones de “Otros”.
El correlato de todo esto fue un aumento del stock de deuda remunerada (Leliq, pases y otras letras) de $330.500 millones, que lo llevó a un total de casi $8,9 billones. Esta deuda ya representa 207% de la base monetaria. Por lo tanto, entre la base y los pasivos monetarios remunerados la cantidad de pesos emitidos es de $13,2 billones.