A pesar de la habilitación del turismo y la actividad hotelera y gastronómica y a la flexibilización de ciertas restricciones en el marco de la emergencia sanitaria decretada por la pandemia de coronavirus, las ventas minoristas de los comercios pymes de la provincia de Córdoba finalizaron julio con una caída de 2,7% en comparación con igual mes de 2020, de acuerdo con los datos relevados por la Federación Comercial de Córdoba (Fedecom), y sus Cámaras y Centros Comerciales adheridos en toda la provincia.
Vale recordar que en julio del año pasado, respecto a julio de 2019, las ventas se habían retraído 18,7%. “Ni siquiera una buena temporada de turismo de invierno –según los resultados informados por la Provincia de Córdoba- lograron revertir el desempeño de las ventas minoristas de las pymes en julio”, indicó el presidente de Fedecom, Ezequiel Cerezo.
“Gran parte de la sociedad sigue atravesando problemas relacionados con la falta o la insuficiencia de ingresos, o con la incertidumbre en relación a lo que sucederá los próximos meses, con lo cual la precaución sigue siendo el comportamiento que prevalece a la hora de consumir”, agregó.
En efecto, 10 de los 11 rubros relevados por la entidad mostraron valores negativos en la comparación interanual respecto a las cantidades vendidas, incluidos alimentos y bebidas. La excepción fue farmacia.
De esta forma, los comportamientos fueron los siguientes: alimentos y bebidas (-1,2%); artículos deportivos y de recreación (-3,2%); calzados y marroquinería (-2,4%); electrodomésticos y artículos electrónicos (-1,8%); farmacia (3,7%); ferretería, materiales eléctricos y materiales para la construcción (-1,5%); indumentaria (-2,6%); juguetería y librerías (-6,7%); muebles y decoración (-8,4%); neumáticos y repuestos (-6,2%); perfumería y cosmética (-8,5%).
Frente a ello, la situación actual de los comercios sigue siendo entre regular y mala, según la consideración del 69% de los encuestados.
Al analizar la forma en que se cobraron las ventas por parte de los comerciantes durante los meses de junio y julio, se observa que el componente de Medios electrónicos (débito y crédito) se colocó en primer término con un porcentaje que disminuyó del 65% al 61%. Efectivo, permaneció sin cambios respecto al mes anterior. Mientras créditos propios, aumentó del 5% al 9% del total.