ESCUCHARDe acuerdo con el relevamiento realizado por el CEPA con base en las publicaciones del Boletín Oficial de la Provincia de Córdoba, en los primeros nueve meses de 2019 hubo llamado de acreedores en 124 empresas, por sobre las 71 de igual lapso de 2018
La cantidad de concursos preventivos, antes llamados convocatoria de acreedores o concordato preventivo, se incrementó en la provincia de Córdoba 74,6% en los primeros nueve meses del año, con relación a igual período del año anterior, mientras que las empresas que se declararon en quiebra mostraron un descenso de 22,4% para la misma comparación, de acuerdo con un informe elaborado por el Centro de Economía Política (CEPA), con base en las publicaciones del Boletín Oficial de la Provincia de Córdoba.
De este modo, desde enero y hasta fines de septiembre pasado, solicitaron el procedimiento de concurso de acreedores 124 firmas, de las cuales 82 estaban registradas como personas humanas (tal la designación que se le diera en el nuevo Código Civil y Comercial) y 42 como personas jurídicas. La cifra es bastante superior a las 71 concursadas en 2018, a las 68 de 2017 y a las 59 de 2016, siempre realizando la misma comparación de los nueve primeros meses de cada año.
Por su parte, las caídas en quiebra, es decir la situación jurídica en la que la persona, empresa o institución no puede hacer frente a los pagos que debe realizar, porque estos son superiores a sus recursos económicos disponibles, sumaron 97 en la provincia de Córdoba, de las cuales 56 estaban registradas como personas humanas y 41 como personas jurídicas. La cifra total, sin embargo, muestra una mejora respecto de las 125 que se declararon en quiebra de 2018, aunque por encima de las 87 de 2017 y las 69 de 2016.
“La situación económica argentina se encuentra en estado crítico”, afirma el informe del CEPA. “Desde mayo de 2018, el nivel de actividad medido por el EMAE del Indec acumula 13 caídas y sólo tres leves alzas. La política de altas tasas sostenida durante la gestión Cambiemos, intensificada a partir de la corrida cambiaria de abril de 2018 y reinaugurada el 1 de octubre luego del segundo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), tiene fuertes vínculos con este proceso de retracción en la actividad, afectando las ventas de las empresas y la propia viabilidad del sector productivo por el alto costo de financiamiento”, agregó en su análisis.
Asimismo, explicó que “el proceso de concurso se corresponde con la solicitud judicial de una empresa para lograr un plan de propuesta y readecuación que le permita acordar con sus acreedores la cancelación de los compromisos que la llevaran a dicha situación, continuando así su actividad. Esta situación, en caso de no concretarse o cumplimentarse, derivará en una solicitud de quiebra, que es la liquidación de bienes mediante remate judicial hasta la cancelación del total de compromisos fehacientemente reconocidos por el síndico designado”.
Finalmente, el CEPA aseguró que cuando los procesos preventivos, concursos y quiebras aumentan significativamente “es debido a que las condiciones macroeconómicas hacen inviable que se mantenga la actividad por causas que le son ajenas. Lo que en definitiva ocurre es un proceso de destrucción económica de valor”.
De este modo, introdujo el resultado del relevamiento que realizó para los primeros tres trimestres del año, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), la Provincia de Buenos Aires y la de Córdoba, donde se localizan 61% del total de empresas registradas en el país (2017, último dato disponible).
Así, la suma de los concursos y quiebras -considerando personas humanas y jurídicas- en las tres jurisdicciones sumó 103 casos, 15% más respecto a los 1.042 casos registrados para el mismo período de 2018. En total, “es un promedio de siete empresas que entraron en concurso o quebraron por día hábil (mientras que en los primeros tres trimestres de 2018 eran seis). Si este número se proyecta al total del país, son 11 empresas diarias que quebraron o entraron en concurso”, destacó el CEPA.
De los 1.203 registros, 53% (638 casos) se concentraron en la Ciudad de Buenos Aires, 29% (344 casos) en la Provincia de Buenos Aires, y 18% (221 casos) en Córdoba. Y destacó que, mientras que en Córdoba y Buenos Aires la mayoría de los casos corresponden a personas humanas (62% y 71% respectivamente), en CABA estos números se invierten, siendo 67% personas jurídicas.
“El promedio de siete empresas diarias que entró en crisis recientemente representa tanto un indicador de la gravedad de la crisis económica actual, como una alerta sobre el riesgo sistémico en el futuro cercano de continuarse tensionando la cadena de pagos y el deterioro sobre la situación financiera de las empresas”, alertó.
Por sectores y actividades
Si se consideran los concursos presentado según el sector de actividad, se puede observar que el más afectado es el de Servicios (216 casos en 2019 y 573 desde 2016). Le siguen Comercio (85 casos en 2019 y 221 desde 2016) e Industria (65 y 200 casos para los mismos períodos).
Si -en cambio- se consideran las variaciones porcentuales, el mayor incremento se presenta en Servicios, donde entre 2016 y 2019 aumentaron 135% los casos de concursos presentados, mientras que el sector Primario lo hizo en 120% y el de Industria en 103%.
En cuanto a las quiebras, en lo que va de 2019 fueron también los Servicios los más afectados en términos absolutos (285 casos), seguidos de Industria (128 casos) y Comercio (124 casos).
En términos de variación, para la Construcción se produjo un incremento de 104%, mientras que la Industria fue de 51% y el sector Primario de 38%. En el caso del Sector Comercio, hubo una disminución de los casos de 12% respecto del año 2016.
