Las comisiones de la Cámara de Senadores se reunieron ayer martes para empezar a debatir la Ley Bases y el paquete fiscal que ya cuentan con media sanción de Diputados.
El debate, que inició con el pedido de nulidad de Unión por la Patria por la alteración del texto del proyecto, contó con la presencia del ministro del Interior, Guillermo Francos, el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman.
El plenario estuvo constituido por las comisiones de Legislación General; Asuntos Constitucionales; y Presupuesto y Hacienda. Para que el proyecto se vuelva ley, debe contar con la aprobación del Senado.
De lograrse, se reformarían medidas como impuesto al tabaco, privatizaciones, reforma laboral, impuesto a las Ganancias y Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), moratoria previsional, entre otros cambios.
El plenario consistió en la ronda de preguntas, que fueron desde la aclaración del contenido de la redacción al argumento político de los postulados, por parte de los senadores a los funcionarios del Ejecutivo nacional.
Uno de los momentos de mayor tensión fue el cruce entre el senador José Mayans (Unión por la Patria) y Guillermo Francos, cuando el opositor le preguntó: “¿Usted cree, como el Presidente, que el Senado es un nido de ratas?
En un discurso en el que hizo hincapié en la necesidad de obras públicas y energéticas en la provincia de Chaco, el senador Víctor Zimmermann (UCR) le consultó cuál era el criterio de “la reconducción de los contratos de obra pública”, que compone el artículo 73 de la ley Bases. “Señala algunas obras que ya hemos hablado con el Gobernador. Seguramente hubo un momento de esta gestión en donde no había ninguna posibilidad porque no había recursos. […] Cuando existan recursos, este año probablemente, podamos avanzar en algunas de ellas”, le contestó Guillermo Francos, insinuando la generación de acuerdos.
Su compañero de bancada, Martín Lousteau (UCR) fue crítico con el RIGI: solicitó debatir una progresividad en los beneficios tributarios para absorber mayor cantidad de inversiones, discutió la necesidad de debatir las ventajas que ofrece la permanencia del cepo para grandes corporaciones y pidió revisar el criterio federal de la norma dado que financiarían las exenciones por tres décadas.
“El RIGI es optativo. Si la provincia no se adhiere, difícilmente una empresa decida instalarse en esa provincia si no va a poder la garantía de que no le van a cobrar impuestos adicionales”, fue la respuesta de Carlos Guberman, secretario de Hacienda, quien aclaró que “si una inversión se instala en una provincia que no adhirió al régimen, después será un problema de la empresa con la provincia o el municipio si le incrementan la carga impositiva”. A su vez, detalló que “no se pueden usar la ventaja de derechos de importación para insumos productivos, sino para bienes de capital relacionados con la inversión”.
Durante su participación, el ministro Francos encabezó una exposición que justificó la necesidad de avanzar con las reformas que integran la ley Bases. “Si uno recorre los 40 años de historia democrática que llevamos en la Argentina, cada gobierno en su comienzo tuvo que resolver problemas heredados y crisis económicas generadas por los gobiernos que lo precedieron. El presidente Milei se encontró con la peor crisis de toda la historia de la democracia”, reflexionó.
En ese marco, apuntó: “Llegamos aquí a dar un examen sobre una ley que fue intensamente considerada, que ustedes la conocen porque han analizado con sus diputados este proyecto y el proyecto de reforma fiscal”.
El ministro defendió los puntos de la reforma laboral, sosteniendo: “Lo he hablado con los dirigentes sindicales más importantes del país y todos coinciden en que es necesario modificar las normas de la Ley de Contrato de Trabajo”. A su vez, le atribuyó la informalidad a que la actual legislación “es un castigo para las empresas pymes, que no los pueden tomar en blanco”, aunque consideró que son “modificaciones pequeñas”.
Por lo demás, el vocero presidencial, Manuel Adorni, se refirió a los cambios irregulares identificados por la oposición en el texto de la Ley Bases y, ante la consulta en su habitual conferencia de prensa, aseguró que se trató de un “error de tipeo”.