En el segundo trimestre, había 728 mil ocupados, 16 mil más que un año atrás. Con todo, había 226 mil demandantes de más trabajo, apenas por encima de 2022. Respecto a la tasa de empleo, fue la mayor en 20 años. La desocupación, en tanto, tuvo una leve baja y se ubicó en 8,3%, por encima del 6,2% del promedio país, según el Indec
La tasa de empleo en el Gran Córdoba alcanzó en el segundo trimestre del año 45,7%, es decir, fue 0,7 punto porcentual mayor que la de un año atrás y la más alta en 20 años, según estimó el Gobierno provincial con base en datos del Indec.
La mejora difundida por el organismo estadístico, en su informe sobre el Mercado del Trabajo en el país, se tradujo en que 728 mil cordobeses tenían algún tipo de ocupación en ese período, 16 mil más que un año atrás.
Sin embargo, 226 mil de esos ocupados eran demandantes: pese a tener trabajo, buscaban otro. Esa cifra fue prácticamente la misma que el año pasado.
Se trata de una clara señal de que los ingresos laborales -para un tercio de los ocupados- no son suficientes y necesitan de recursos extra por medio de otro trabajo.
En tanto s, 112 mil personas figuraban como subocupadas o sea ocupados que trabajaban menos de 35 horas semanales. Un año atrás, eran 22 mil más.
Ocho de cada 10 personas que estaban en esa condición eran subocupados demandantes, esto es, también procuraban sumar más horas para mejorar sus ingresos.
“El crecimiento de la tasa de empleo se explica principalmente por el aumento sostenido en la creación de empleos asalariados registrados en el sector privado en la provincia de Córdoba”, señaló por su parte un informe difundido por la Provincia.
En tanto, el desempleo en el segundo trimestre fue de 8,3%, 0,4 punto porcentual menos que en 2022. Traducido en números, había 66 mil desocupados, dos mil menos que un año atrás.
La desocupación en Córdoba fue la más alta del país, una décima por encima de Mar del Plata, siempre según el Indec, en la muestra que releva 33 aglomerados urbanos en Argentina.
En el país, el desempleo fue de 6,2%, 0,7 punto menos que 12 meses atrás.
“El crecimiento de la ocupación generó una reducción menor que la esperada en la desocupación, producto de la incorporación a la búsqueda de empleo de personas anteriormente inactivas (sin la incorporación de nuevas personas a la búsqueda de empleo la desocupación habría bajado 1,1 punto porcentual). En este contexto de alto nivel de empleo, pero con salarios degradados por el acelerado proceso inflacionario, el crecimiento de la búsqueda de empleo por parte de personas anteriormente inactivas se puede explicar por la necesidad de los hogares de sumar ingresos”, consideró el Gobierno de Córdoba.
En lo que respecta a asalariados registrados del sector privado, en el segundo trimestre 2023 la provincia de Córdoba muestra la mayor tasa de crecimiento de las jurisdicciones de más de tres millones de habitantes (crecimiento de 4,7% respecto al segundo trimestre 2022), superando en generación de empleo al promedio nacional (3,7%), a la Provincia de Buenos Aires (3,4%), CABA (3,5%) y Santa Fe (2,5%).
“Esto se debe principalmente a que, en Córdoba, provincia con el menor nivel de empleo público, la dinámica del sector privado tiene mayor protagonismo”, explicaron en el Ejecutivo.
En el país
En tanto, la desocupación en el país fue de 6,2%, menor que el 6,9% de un año atrás, según el Indec.
La baja se produjo a pesar de que el Producto Interno Bruto cayó 4,9% en la comparación interanual, y 2,8 % entre el segundo trimestre y el primero.
En forma paralela, la subocupación demandante bajó también a 7,4% en el segundo trimestre, frente al 7,7% de igual período del 2022.
En tanto, la subocupación no demandante se ubicó en 3,2%, por debajo del 3,5% de igual período de 2022, y levemente por sobre el 3,1% del primer trimestre.
El Indec estimó a la Población Económicamente Activa en 47,6% del total, es decir, alrededor de 14 millones de personas. De este conjunto, 13,1 millones estaban ocupadas, y 900.000 no tenían empleo y lo buscaban de manera activa.
Entre los ocupados, 74,2% es asalariado, es decir, unos 9,7 millones, de los cuales 6,1 millones tienen descuento jubilatorio y 3,6 millones no lo tienen.