Aunque las ventas en supermercados mejoraron más de 10% en marzo con respecto a febrero, aún no se recuperan a niveles prepandemia. Las ventas mayoristas incluso caen siete puntos
Dos informes que se conocieron ayer con apenas minutos de diferencia reflejaron claramente que la economía nacional se mueve a dos velocidades: la producción manufacturera (y también la primaria) se recuperó del bajón de la pandemia y marcha en algunos sectores hacia niveles récord (ver aparte); pero no sucede lo mismo con el consumo, que sigue deprimido y sin encontrar el modo de salir del pozo de 2020 y de la larga recesión previa.
Según el relevamiento periódico del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), las ventas en los supermercados bajaron durante marzo 8,8% en relación con igual mes del año pasado, cuando la cercanía de las medidas de aislamiento para enfrentar el covid-19 alentaron una sobredemanda. No se han recuperado a niveles prepandemia, hasta ahora, aunque las ventas de marzo, medidas a precios constantes, estuvieron 10,3% por encima de las de febrero, destacó el organismo.
En tanto, en los grandes centros de compra las ventas de marzo estuvieron casi 60% por encima de las de igual mes del año pasado y fueron 14,4% superiores a las de febrero.
En los grupos de artículos, los aumentos más significativos durante marzo respecto al mismo mes del año anterior fueron: Indumentaria, calzado y textiles para el hogar, 110,4%; Electrónicos y artículos para el hogar, 99,9%; Bebidas, 50,4%; y Otros, 40,7%.
Las jurisdicciones donde se registraron las subas más importantes de las ventas totales a precios corrientes fueron: Misiones, 49,2%; Santiago del Estero, 43,2%; Formosa, 39,6%; La Pampa, 36,4%, y Jujuy, con 36,3%.
En los autoservicios mayoristas las ventas sumaron $18.311 millones, lo que representa un incremento de casi 21% respecto al mismo mes del año anterior; pero medidas a precios constantes mostraron una caída de 7% interanual.
En cuanto a los grandes centros de compras, el Indec contabilizó en todo el país 6.134, de los cuales 1.620 (26%) estaban inactivos, entre ellos 34 cerrados “por reforma”.
El menor precio por unidad, visible
Los supermercados tienen desde ayer la obligación de señalizar en las góndolas el producto más barato para cada categoría, medida que comenzó a implementarse en los últimos días según lo dispuso la Ley de Góndolas.
El pasado día 12, la Secretaría de Comercio Interior, mediante la resolución 485, estableció la obligatoriedad de señalizar con cartelería destacada el producto de menor precio por unidad de medida. La norma reglamentó el inciso C del artículo 7 de la Ley de Góndolas, que exige que los productos más baratos por unidad en cada góndola estén a una altura equidistante entre el primero y el último estante, y que el valor no puede ser de “carácter transitorio”. De esta forma, el precio más bajo no podrá surgir de ofertas, bonificaciones o descuentos de cualquier tipo; y deberá estar exhibido con cartelería perpendicular a la góndola, que indique la leyenda “MENOR PRECIO por unidad de medida. Ley 27.545”.