La fuerte presión impositiva sobre la cadena comercial del sector automotriz y la venta clandestina que esto genera provocará el cierre de muchas concesionarias en la Argentina, denunció el titular de la Cámara del Comercio Automotor, Alberto Príncipe.
Incluso, el directivo advirtió que la situación se agrava en el interior del país, donde muchas provincias aplican impuestos aún más elevados que los de la Nación y la Ciudad de Buenos Aires.
“En el sector de autos usados, lo que tributa el sector lleva al cierre a muchas agencias”, sostuvo Príncipe.
Explicó que “si tomamos un auto de 40 mil pesos, el margen con el que se trabaja esta entre el 13 y 14%, el que permite el mercado, pero esto siempre que se haya adquirido el vehículo, porque si se lo toma en consignación el margen es menor”.
“Quiere decir que uno vende el auto a 40 mil pesos. Pero sobre ese importe se tiene que pagar 21% de IVA, 1,2% del impuesto al cheque; 1,5% de Ingresos Brutos, y según la escala en la cual se está inscripto, caso sociedad o CUIT individual, se debe abonar entre 33 a 35% de Ganancias”, enumeró el titular de la CCA respecto a Capital Federal. En el interior, recordó, es aún mayor.