Firmó el instrumento legal que reactiva el contrato suspendido en abril, según adelantó Jorge Sorensen, titular de Grababus, la adjudicataria del negocio. La empresa desistió de las acciones legales. El servicio, que tendrá un costo de $490 para autos, funcionará en una primera instancia en ciudad de Córdoba y en las localidades más importantes del interior. La concesión involucra una facturación anual en torno a $140 millones.