El ministro de Economía, Sergio Massa, dio precisiones sobre el estímulo que recibirán los pequeños productores en la siembra de soja y maíz. Desde la localidad agropecuaria de General Las Heras, el titular del Palacio de Hacienda aclaró que el programa cuenta con un fondeo de $40 mil millones que el Estado invierte para cosechar dólares el año próximo.
Los beneficiarios de este estímulo serán quienes siembran hasta un total 400 hectáreas de soja y los productores de maíz, con un tope de hasta 100 hectáreas, que no hayan vendido sus granos durante septiembre (bajo el esquema del “dólar soja”). De este modo, a partir de noviembre, los beneficiarios recibirán en esta campaña un aporte estimado de $6.000 por hectárea en la siembra de la soja y de $20.000 por cada hectárea de maíz sembrada.
Massa estimó en “más de 19.400” los pequeños productores que recibirán “un subsidio por el 40% de los insumos (semillas y fertilizantes) que utilicen para sembrar”. Así, abaratando el costo de producción, pretenden desde el Gobierno incrementar el área sembrada y contrarrestar, de ese modo, los efectos de la sequía en el volumen cosechado total.
En ese sentido, informes oficiales de la Secretaria de Agricultura proyectan que la campaña agrícola 2022/23 demandaría tan solo 1% más de territorio que la pasada. En efecto, al haber condiciones climáticas adversas que afectan el rendimiento de los cultivos, el volumen de materias primas producido se vería afectado. Por su parte, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) reporta una reducción de la superficie sembrada para el maíz, además de un bajo rendimiento del trigo.
La BCBA proyecta una pérdida de 7,2 millones de toneladas respecto a la campaña pasada, en un contexto en donde el impacto del fenómeno de “La Niña” incrementó en 10 millones de hectáreas a nivel país durante agosto. Por ello, el ministro de Economía propende a la conformación de una mesa de dialogo entre las entidades agropecuarias, cuadros técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y sectores de la comercialización “para que tengamos la capacidad de responder a la emergencia que representa la sequía”.
Si bien la mesa por la crisis hídrica tendrá lugar en esta semana, desde Comercio y Justicia accedimos a informes de coyuntura del INTA en donde los científicos precisan su diagnóstico de situación y proponen alternativas de solución. La disponibilidad de agua que acumulan los suelos cultivables “están por debajo de la que necesitan los cultivos para crecer óptimamente”, advierten los agrónomos.
En consecuencia, en el caso de las oleaginosas, los especialistas del INTA sostienen que lo óptimo en situaciones de escases es alinear el período de mayor demanda de agua de la planta con el momento en que las temperaturas bajan y “aumentan las probabilidades de precipitaciones”. Para lo cual proponen, siempre según la zona en cuestión, comenzar la siembra a mediados de la segunda quincena de noviembre en el caso de la soja.
Similar propuesta evalúan en el INTA para el maíz en un contexto crítico como este. “El retraso de la siembra del maíz lo expone a una mejor oferta de agua en el periodo crítico de floración (marzo)”. También destacan que la cantidad de plantas por metro cuadrado es una variable a atender en un contexto en el que deben optimizar recursos para que la productividad se vea alterada lo menos posible. Respecto a la densidad de la siembra destacan la “mesura”.
Sobre este punto, explican que el exceso de plantas por superficie genera una pérdida de rendimiento mayor, cuando no hay buena disponibilidad hídrica que el potencial rendimiento no alcanzado por trabajar en una “densidad subóptima”. Es decir, los técnicos del INTA proponen, además de siembra tardía, menos plantas por metro cuadrado; incluso, señalan que en el caso de la soja puede haber una compensación dada por una “mayor cantidad de granos por planta”.
Otras medidas para el campo
Además de las medidas para el sector agrícola, el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo dijo al concluir el acto en donde las anunciaron en General Las Heras, que en la semana puede haber más anuncios. El Gobierno analiza alternativas para atender las realidades de sectores como el tambero, el ganadero y las economías regionales ante las prolongadas sequías.
“Estamos pensando permanente de qué manera llegar en la forma más efectiva y asertiva posible teniendo en cuenta que los fondos son finitos y la demanda es importante en este contexto bastante desfavorable por el tema climático”, sostuvo el secretario.