La misión del Fondo Monetario Internacional (FMI), que estuvo durante 10 días en el país para negociar un nuevo programa financiero, concluye hoy su agenda de trabajo y retornará a Washington.
La comitiva liderada Julie Kozak, directora Adjunta del Departamento para el Hemisferio Occidental, y por Luis Cubeddu, jefe de la misión para Argentina; regresará a la capital estadounidense, donde está la sede del organismo.
Mientras tanto, todas las reuniones que restan en el marco de las negociaciones para extender los plazos del pago de la deuda que el país mantiene con el organismo seguirán siendo de carácter virtual
En tanto, se espera que hoy, luego de concluidas las tareas correspondientes, los representantes de la entidad difundan un comunicado de prensa con un balance de la actividad desarrollada.
Vale recordar que esta semana, los integrantes del FMI mantuvieron encuentros virtuales con funcionarios del ministerio de Economía y del Banco Central, entre otros.
Además, la semana pasada, los funcionarios del Fondo visitaron presencialmente al ministro de Economía, Martín Guzmán; al titular del Banco Central, Miguel Pesce; y al presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, entre otros.
Perspectivas
Con relación a las posibilidades de lograr un nuevo convenio, el vicepresidente y analista senior de crédito de deuda soberana de Moody’s, Gabriel Torres, consideró ayer que “un posible acuerdo con el fondo es una oportunidad para el Gobierno para poder alcanzar objetivos mediano plazo, respecto de bajar el déficit y los objetivos macroeconómicos”.
Al participar de un seminario con inversores organizado por la calificadora, Torres dijo que, a partir de “un escenario base en el que el acuerdo llegue en algún momento del primer semestre del 2021”, el entendimiento será positivo para el país, ya que “le permitirá al mercado tomar eso como dato y entender al Gobierno”.
“Creemos que va a haber necesidad de algún tipo de reformas; el Gobierno ha dado algunas señales, de cuál sería ese ajuste fiscal, si bien todavía hay falta de confianza del mercado, y eso refresca la preocupación del costo de financiamiento de la Argentina”, expresó el especialista.
Según Torres, “el compromiso del Gobierno en lograr esto (por las reformas), va a estar en los detalles del nuevo acuerdo con el FMI” que se está negociando.
Respecto al mercado de divisas, Torres consideró que “el Gobierno puede estabilizar el dólar en el corto plazo, pero no puede hacerlo en el largo plazo, eso es imposible si no corrige fundamentales de la economía”.
En cuanto al impacto crediticio de la reciente reestructuración de la deuda que realizó el país, dijo que “Argentina quedó con una calificación Ca, escalón número 20, y eso es un muy alto riesgo crediticio, aun a pesar de la reciente reestructuración”.
Asimismo, señaló que la perspectiva de dicha calificación es “estable, no es probable ni que suba ni que baje en los próximos 12-18 meses”.
Torres recordó que la reciente operación de deuda otorgó “más tiempo a la Argentina para pagar su deuda pero no cambió la deuda principal, sólo extendió plazos y bajó la tasa de interés”.
Por otro lado, descartó que vaya a haber una dolarización de la economía: “no veo apoyo ni político ni de la población”, dijo.