La planta de Santa Isabel analiza poner en marcha por unas semanas un esquema de parates los días viernes y restringir la cantidad de horas extras. En Fiat, en tanto, no trabajó un turno en el día de ayer debido a faltante de piezas. Niegan que haya planificación preestablecida.
La automotriz Renault anunció ayer ante un grupo de trabajadores de la planta de Santa Isabel que analiza la posibilidad de que se trabaje con un esquema de cuatro días durante las próximas semanas. Se argumentan un faltante de piezas y merma en la demanda de vehículos cero kilómetro.
En tanto, desde la planta de Fiat en Ferreyra, confirmaron a Comercio y Justicia que ayerfueron suspendidos 1.500 trabajadores -de un total de 3 mil-, también debido a problemas con la entrega de partes importadas.
La información dada a los empleados del turno tarde de Renault será confirmada en los próximos días, con miras a que el posible parate sea este viernes próximo. “Tienen que confirmarnos la medida”, explicó una fuente a este medio. “Nos comunicaron la posibilidad de que suspendan a los trabajadores de los departamentos de soldadura, pintura y montaje, por faltante en algunas piezas. Pero quedaron en confirmarlo. Puede que en estos días llegue un container con el pedido y se dé marcha atrás con la medida, o no”, explicó, señalando también que “piensan restringir las horas extras”.
“Se están administrando los vaivenes que se registran en la demanda de vehículos cero kilómetro”, había confirmado días atrás a Comercio y Justicia un vocero de la propia empresa de capitales franceses, ante la suspensión implementada el viernes pasado.
En esa ocasión, la medida alcanzó también a los operarios que se desempeñan en los departamentos de soldadura, pintura y montaje. En tanto, trabajó con normalidad el área de estampado (que se desempeña principalmente con los ojos puestos en mercados mundiales) y el personal administrativo. Por su parte, una fuente de la empresa Fiat confirmó que en la jornada de ayer se suspendió a los trabajadores de un turno, es decir, a 1.500 de los 3.000 empleados de la planta de Ferreyra debido también a motivos de faltantes de partes.
“Hay un proveedor de origen brasiñeo que está teniendo inconvenientes con el abastecimiento normal debido a su capacidad de producción”, dijo al reconocer que el lunes trabajaron con normalidad y “por lo que parece” lo harán igual el resto de la semana.
Hace unos días había trascendido que esta automotriz ya estaba trabajando con esquema de hasta tres días a la semana, lo que fue desmentido por fuentes de la empresa. “No se ha dado el caso de que hayan existido dos suspensiones en una misma semana ni que se hubieran registrado en los dos turnos el mismo día”, indicaron.
Rediseño de producción
La Cámara de de Industriales Metalúrgicos y de Componente de Córdoba (CIMCC) había adelantado a este medio que se ubicaban entre 20 y 25% por debajo de lo previsto para el primer semestre de 2013 los planes de producción recibidos por las autopartistas cordobesas de parte de las terminales a las que abastecen.
Al respecto, fuentes consultadas dela empresa Fiat explicaron que se debe a un “rediseño” del esquema de producción. “En 2013 se fabricaron 12 mil vehículos durante el primer semestre del año, quedando la planta como la de mayor producción a nivel nacional. Eso no pudo mantenerse durante el segundo semestre, período en el que la producción cayó y se ubicó en torno a los 3 mil y 4 mil vehículos”, detallaron.
Para este año, la terminal se ha propuesto “una producción más regular, por lo que se ha fijado como meta fabricar 8 mil automóviles por mes. De hecho, en enero pasado, salieron 8.500”, dijo la fuente, negando luego el esquema de tres días de trabajo a la semana: “Eso no podría hacerse con menos personal o con gran cantidad de días con operarios suspendidos”.
Matricería Austral
– La situación de la Matricería Austral sigue siendo complicada, por lo que hay un alto riesgo de que sus 300 trabajadores sean despedidos. El secretario general del Smata, Omar Dragún, aseguró que gracias a un esfuerzo de las automotrices pudieron abonar los sueldos correspondientes al mes de diciembre, pero no así los de enero que reclaman los empleados. “La situación grave viene desde hace más de un año. Venimos atendiendo la necesidad, pero desgraciadamente no hay quienes compren matrices en la Argentina. Estamos detrás de inversores extranjeros”, dijo el líder sindical.