El canciller se reunió con el mandatario del vecino país a quien le aseguró que no habrá salida de la recesión y aumento en el intercambio comercial hasta que no se encamine el tema de la deuda
El canciller Felipe Solá le pidió ayer en Brasilia al presidente Jair Bolsonaro, apoyo para la renegociación de la deuda argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI), mientras que el mandatario brasileño propuso la primera cumbre con el presidente Alberto Fernández para el 1 de marzo en Montevideo, durante la asunción del nuevo gobierno uruguayo.
El primer cara a cara oficial entre el gobierno de Fernández y Bolsonaro logró reducir las tensiones que se arrastraron durante todo el 2019 hasta la semana pasada; y Argentina obtuvo, al menos, el espacio para explicarle a su principal socio que no habrá salida de la recesión y aumento en el intercambio comercial hasta que no se encamine el tema de la deuda.
“Hay cosas que se entienden cuando uno está acá o cuando de acá van a la Argentina. Sí, han cambiado las cosas”, dijo Solá sobre el deshielo entre Buenos Aires y Brasilia, tras reunirse con Bolsonaro en el despacho presidencial del Palacio del Planalto, la sede de gobierno.
“Bolsonaro le manda un abrazo al Presidente y espera verlo el 1 de marzo” contó Sola y reveló que se sorprendió con la fecha propuesta. Ese día asumirá en Uruguay el presidente electo Luis Lacalle Pou, pero el canciller explicó que ese mismo día el presidente Fernández deberá abrir las sesiones ordinarias del Congreso.
“Se podría hacer el discurso a la mañana y, a la tarde, ir a Uruguay a la asunción”, estimó el jefe del Palacio San Martín.
Solá encabezó la comitiva argentina más importante en mucho tiempo en Brasilia: estuvo reunido 50 minutos con Bolsonaro y, antes, con su equipo de trabajo mantuvo un encuentro con el canciller Ernesto Araújo, en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores.
De las reuniones participaron también el embajador designado, Daniel Scioli, y el ministro de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; mientras que -por Brasil- estuvieron el vicecanciller Pablo Tettamanti, el jefe de gabinete de cancillería, Guillermo Chaves, Jorge Neme, y la subsecretaria de asuntos del Mercosur, Carmen Squeff.
El primer mensaje argentino fue dicho ante Araújo y luego repetido ante Bolsonaro. A ambos, Solá les explicó el tema de la deuda, sobre todo la adquirida con el FMI desde 2018, una situación “heredada” del gobierno de Mauricio Macri, candidato apoyado por Bolsonaro durante 2019.
“Le hemos pedido apoyo en la negociación con el FMI, entendió bien y supongo que lo hablará con su equipo. Bolsonaro escuchó con atención, no le pedí una respuesta inmediata”, dijo.
Fue más enfático al realizar la declaración a la prensa en la cancillería, al lado del canciller Araújo: “Les pedimos a Brasil que nos apoye en la manera que puedan con el FMI porque (la deuda) es el primer paso de una escalera, porque en caso de un buen acuerdo pedimos tiempo para crecer y para pagar. No caeremos en default”.
Solá hizo hincapié en que la recuperación argentina de la recesión actual depende de esos acuerdos, una situación clave para que Brasil pueda recuperar el nivel de sus exportaciones a Argentina (ver aparte).
Durante su alocución, Araújo calificó de “excelente” la reunión con el canciller argentino y puso énfasis en la mirada sobre el Mercosur como una “plataforma dinámica para la inserción en la economía internacional, como un polo de crecimiento económico”.
El canciller del gobierno brasileño dijo que el Mercosur debe hacer acuerdos con otros países e informó que tanto Brasil como Argentina han decidido convocar a una reunión bilateral de comercio, aún sin fecha, para analizar el panorama bilateral, regional y global.
Las exportaciones brasileñas en baja
Las exportaciones de Brasil hacia Argentina cayeron 34,3% en términos interanuales en 2019, siendo la industria automotriz la actividad más golpeada, según señaló ayer un informe de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC).
En términos globales, las ventas de Brasil al exterior tuvieron una caída de 6,5% en 2019, de acuerdo a información del Ministerio de Economía de Brasil difundida por la CAC.
Desagregando por países, los números muestran una caída de 0,9% en los envíos hacia China, principal destino exportador de Brasil; un aumento de 3,6% en las ventas hacia Estados Unidos, como consecuencia de la devaluación del real brasileño; y una caída de 9,1% con Alemania respecto a 2018.
Por último, el informe destacó que un crecimiento de Brasil, principal socio comercial de Argentina, “nos beneficiará al incrementar la demanda de importaciones”.