Alimentos también traccionarán la inflación durante 2021 y profundizarán la desigualdad

Lo indicó el economista cordobés Pablo Diaz Almada, al precisar la incidencia de la tensión cambiaria en el valor de las canastas alimentaria y total. El profesional hace mensualmente una medición del costo de vida según los gastos de su propio hogar

Aunque es difícil hacer previsiones en un escenario de alta volatilidad debido a la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus, se estima que -al menos en la primera parte de 2021- sean los alimentos y las bebidas los que continúen traccionando la inflación y profundizando la desigualdad económica en el país. [privado]

Así lo advirtió Pablo Diaz Almada, licenciado en Economía, docente e investigador en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) . El profesional integra el Observatorio de Trabajo, Economía y Sociedad (OTES) .

Estas perspectivas se basan en la observación de datos provenientes del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) , del Banco Central de la República Argentina (BCRA) , de entidades privadas y de una medición propia que realiza el economista sobre los gastos que afronta su propio hogar mes a mes, con base en algunos de los parámetros del organismo estadístico nacional.

“Suponiendo que las tensiones en el mercado cambiario continúen -dijo Diaz Almada en diálogo con Comercio y Justicia - es de esperar que sean los alimentos los que lideren los aumentos en los próximos meses”, aunque agregó que “en realidad, siempre es difícil realizar una previsión exacta en este contexto”.

Aun así, el especialista sostuvo sobre la base de las estadísticas existentes que en 2020 se puede observar que “dentro de las fuentes que están impactando más en la evolución de los precios son las tensiones existentes en el mercado de cambios, que siguen funcionando y no parecen encontrar una resolución”.

Según detalló el docente e investigador de la UNC, estas dificultades hacen que “comiencen a aumentar los precios de los bienes transables, al igual que el de los combustibles” , demostrando que hasta ahora las políticas de congelamiento y de Precios Cuidados resultaron “insuficientes”.

Además, este año, se sumará a este escenario las primeras discusiones paritarias luego del parate económico sobre todo de la primera parte del año pasado, el cual en palabras del economista constituye una variable a tener en cuenta ya que es “el costado monetario de la lucha de intereses y el conflicto se manifiesta allí”.

Así, esta relación compleja entre precios de productos básicos, salarios y tipo de cambio muestra -al menos en el corto plazo- una profundización de las desigualdades, ya que es la canasta de alimentos la que mayor incidencia tiene en las familias de menores ingresos y menor incidencia en quienes tienen mejores posibilidades económicas.

“Gran parte de la proporción de los gastos de las familias más pobres está en alimentos y esta situación que se da en el mercado cambiario hace mover los precios de estos productos hacia arriba”, explicó Diaz Almada.

Comparaciones

Algunas de las variables que intervienen en el proceso actual de formación de precios y en los análisis que realiza Diaz Almada se encuentran en un documento publicado en Internet, donde además el profesional compara los valores oficiales de la evolución del costo de vida con una canasta realizada sobre sus propios gastos familiares.

Según un cuadro que se detalla en esta publicación, mientras para el Indec la inflación acumulada en 2020 fue de 36,1%, en el caso de la medición familiar (denominada “IPCDR”) el incremento llegó a 48,2%

Esto se debe, fundamentalmente, a que la canasta considerada no tiene los mismos elementos en cuanto a alimentos y otros rubros como el transporte, pero aun así se pueden confirmar las tendencias.

Específicamente, en el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas para el organismo nacional de estadísticas la suba durante el año pasado fue de 44,7%, mientras que para el IPCDR fue de 66,1%.

Vale también en este sentido indicar que los artículos que componen la medición del Indec son promedio del país y que constituyen más un indicador que una realidad de alimentos o gastos de las familias.

“Las respuestas desde los gobiernos vienen siendo no sólo insuficientes en el contexto de recesión, informalidad y precarización del trabajo, caída de los salarios reales, sino que además no aparecen en la escena las discusiones sobre los problemas estructurales de una sociedad desigual”, dice Diaz Almada en el documento que se encuentra online, considerando que el contexto de pandemia que vive el país y el mundo necesita un cuestionamiento profundo.

CIFRAS OFICIALES

El Indec informa la variación de la actividad económica en noviembre

El Indec informará mañana la variación que registró la actividad económica en noviembre pasado, período en el que la industria y la construcción registraron mejoras en el cotejo interanual y contra el mes previo.

En efecto, la actividad de la construcción mostró una suba de 6,2% respecto a igual mes del 2019 y reflejó la primera mejora interanual desde julio del 2018.

Además, la producción industrial creció 4,5% interanual en noviembre y revirtió así la caída de 3,1% de octubre, según cifras del organismo estadístico nacional.

El viernes pasado, el ministro de Economía, Martín Guzmán, destacó que por el coronavirus “enfrentamos una situación distinta” a la de marzo pasado, cuando se pusieron en marcha las medidas de aislamiento, aunque “con similitudes, porque todavía está la pandemia que genera incertidumbre en todo el mundo”.

“Tenemos una economía que lleva cuatro meses en recuperación, una recuperación heterogénea pero que cada día se va volviendo más sólida y que se pudo sostener de pie a pesar de mucho sufrimiento”, subrayó Guzmán durante un acto desarrollado en la Casa de Gobierno del Chaco.

De esta manera, el titular del Palacio de Hacienda se refirió a que, si bien algunos sectores como la construcción y la industria vienen aumentando, otros, como el comercio, el transporte, o todo lo referido al turismo, continúan en números negativos.

En octubre pasado, el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) marcó una baja de 7,4% respecto a igual mes del año pasado, con lo que acumuló un retroceso del 11,3% en los diez primeros meses del año.

Guzmán estimó que la economía crecerá este año 5%, mientras que los privados calculan un rebote de 4,5%, según el Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM), que realiza el BCRA.

TENDENCIAS

La digitalización crece en los consumidores debido a la crisis sanitaria

La crisis sanitaria desatada por el coronavirus generó cambios en los hábitos de compra y alimentación de los consumidores e instaló una nueva preferencia por el comercio electrónico y el retorno a la producción hogareña -en especial en la comida-, que aceleró la transformación digital que las empresas venían gestando previo a la pandemia, coincidieron especialistas.

"Tanto las compañías como los consumidores nos tuvimos que adaptar a los nuevos desafíos que generó la pandemia; se generaron transformaciones a un ritmo impensado, las compañías tuvieron que cambiar modelos de operaciones, convertirse digitalmente y el consumidor aprender a usar nuevos canales", dijo Eduardo Harnan, socio líder de la industria de Consumo y Retail en la consultora KPMG Argentina.

El especialista observó que a partir de la pandemia "hubo una transformación digital tremenda que hubiera tardado años en desarrollarse; esto (la pandemia) lo aceleró de una forma sumamente significativa".

En este contexto, señaló que "esta digitalización y adaptación de nuevos negocios abarcó todos los procesos: logística, distribución, facturación; creció mucho la inversión de las compañías y pedido de asesoramiento sobre ciberseguridad".

"Algunas empresas se adaptaron más rápido y otras están todavía en ese proceso", consideró.

Por su parte, Maximiliano Doff, líder de Analytics de Nielsen para la región sur, señaló en diálogo con este medio que "el desarrollo del ecommerce es la gran estrella del consumo de este año, en pocas semanas o meses triplicó su peso previo a la cuarentena".

"Personas que antes no lo utilizaban pasaron a experimentar ese canal, eso se observa por cómo cambia el mix de productos: los alimentos frescos, lácteos y congelados tenían una barrera alta de ingreso al online y la necesidad de resolver esto sin salir de casa generó que estos productos ganen relevancia", detalló.

En ese sentido, proyectó que "el ecommerce, no con un shock tan fuerte como 2020 pero sin lugar a dudas tiene que seguir creciendo este año, porque logró incorporar una nueva base de compradores que no tenía y es una vía interesante". [/privado]