La Municipalidad de Córdoba dispuso que a partir de ahora, todos los agentes públicos que registraban su ingreso y egreso en el Palacio 6 de Julio, deberán hacerlo en sus respectivas dependencias.
La decisión aparece reflejada en la resolución firmada en las últimas horas por la secretaria General de la comuna, Verónica Bruera. La normativa asegura en los considerandos que la medida se toma para “asegurar que los agentes presten en tiempo y forma” sus servicios.
Es que, según trascendió, de los 3.904 empleados que tienen habilitado marcar asistencia en el Palacio 6 de Julio, sólo 1.278 se desempeñan en el lugar.
En tanto, los otros 2.626 “marcan” en el edificio central pero trabajan en otros lugares.
En la práctica, aseguran, esa situación implica que el tiempo efectivo de trabajo sea sensiblemente menor respecto al que surge de la marcación horaria.
La medida seguramente generará nueva tensión entre la Municipalidad de Córdoba y los empleados nucleados en el Suoem.
La avanzada de la administración de Martín Llaryora sobre las condiciones laborales comenzó ya tiempo atrás con diferentes acciones, por ejemplo la relativa a la reducción de la jornada laboral, que implicó una baja nominal de los salarios.
Pero la actitud de las autoridades incluyó otras acciones, entre ellas la baja de “chapas” de inspector a personal que no realizaba tareas e inspección, entre otras.
En tanto, ayer no prosperó el proyecto del Ejecutivo para avanzar en el Concejo Deliberante con un proyecto para revisar el plus salarial que cobran muchos docentes quienes, sin embargo, no prestan servicios en zonas desfavorables o vulnerables.