El nivel de bancarización de la economía argentina está retrasado respecto de otros países de la región, y la distribución de las casas financieras se concentran entre Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, señaló la consultora Deloitte.
“Las sucursales pasaron de 4.381 en 2001 a 3.876 en 2003, mientras que entre 2003 y 2007 sólo se abrieron 26 casas”, advirtió.
Además, marcó que el indicador de depósitos y préstamos, en función del PBI, “también está retrasado, siendo inferior al 21% de México, al 33 de Brasil y al 55 de Chile".
“Estos datos toman relevancia si se considera que el promedio de países emergentes de Europa y Asia tienen una proporción de 41 y 80%”, precisó el estudio.
Según Deloitte, para maximizar la bancarización en Argentina “son importantes las políticas de educación y difusión de las alternativas que posee el sistema bancario”.
En términos de distribución geográfica, Capital Federal, Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe “insumen la mayor cantidad de casas en el país: más del 70% del total”, comprobó el sondeo de Deloitte.
Además, aseguró que el “buen crecimiento” de la economía argentina de los últimos años “no fue acompañado en la misma dimensión por el crecimiento de los préstamos y depósitos en el sistema”.
En otro orden, destacó que el Banco Central “se ha mostrado atento ante la necesidad de los bancos para desarrollar el sector, ya que, mediante el Estado, “se facilitó la habilitación de casas móviles, la instalación de sucursales en zonas de bajo acceso y se flexibilizaron los requisitos para la instalación de nuevas Cajas de crédito cooperativo".