Así lo advirtieron economistas del CPCE, quienes consideran posible que se repitan las condiciones de 2009 durante la crisis internacional. La suba podrá ser de dos puntos porcentuales hacia fin de año, lo que elevaría el indicador a 9,5%, levemente por debajo de los dos dígitos.
Luego de conocerse las cifras de desempleo que difundió el martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), por las que se conoció que la tasa de desocupación afectaba a 890 mil argentinos en el segundo trimestre del año, la Comisión de Economía del Consejo Profesional de Ciencias Económicas (CPCE) de Córdoba estimó que la cifra podrá incrementarse en 200 mil más hacia finales de diciembre.
Si bien la proporción del incremento dependerá -según los economistas- de la incidencia de la política económica que aplique el Gobierno, consideraron posible que la tasa de desocupación se incremente en dos puntos porcentuales, lo que implicaría que el índice se ubique en 9,5% del total de la población económicamente activa (PEA).
No obstante, Mary Acosta, integrante de la comisión, afirmó: “No creo que se llegue a dos dígitos”, aunque explicó que “se está detectando una situación similar a la de la crisis de 2009”.
“Si se repitieren las condiciones, la suba será de aproximadamente dos puntos porcentuales”, indicó.
Consultada por Comercio y Justicia respecto de la situación puntual de Córdoba, que el informe del Indec la ubicó como la jurisdicción de mayor desempleo del país, Acosta respondió: “En el caso de Córdoba la situación es mucho más complicada porque el empleo es muy dependiente del nivel de actividad de la industria automotriz, que no muestra mejoramiento alguno, no sólo por el mercado interno sino, y fundamentalmente, debido a que el principal destino de exportación del sector (Brasil) no muestra signos recuperación”.
En el ámbito nacional
Acosta enfatizó que “desde hace dos años y medio la demanda laboral no se recupera”, señalando que “el cambio incipiente de inicios de 2013 no se sostuvo”.
Asimismo, detalló que desde ese año la actividad “empezó a caer y también lo hicieron las tasas de actividad y la de empleo”. El último dato del Indec marca que entre el segundo trimestre de este año y el primero se incorporaron 53 mil personas a la PEA pero sólo seis mil consiguieron trabajo; el resto engrosó la cantidad de desocupados.
“Unas 50 mil personas representan medio punto en la tasa de desempleo con los actuales niveles de población”, explicó la economista, y agregó que en el último año los focos de las suspensiones y los conflictos son, principalmente, las industrias automotriz, metalúrgica, frigorífica y del transporte de larga distancia, mientras que la de la construcción directamente registra destrucción de puestos.
“Hasta fines de 2013 y principios de año no se generaba empleo. Desde ese entonces, directamente se destruye -dijo Acosta- no tanto por despidos sino porque no se cubren las vacantes que se van generando”. En ese sentido, destacó que el indicador de demanda laboral que elabora el CPCE para Córdoba acumula dos años de caídas.
Medidas oficiales
Frente a esta situación, en las últimas semanas el Gobierno nacional anunció una serie de medidas que pretende incentivar la creación de empleo: los regímenes Proempleo (reflota el Repro, subsidio a las empresas para pago de salarios) y Empleo Joven (práctica remunerada para beneficiarios del Progresar). En la misma línea se ubican “Vivir más cerca” (construcción de casas con la que se esperan crear 100 mil empleos directos y 160 mil indirectos -de lo anunciado sólo la mitad está sin empezar-), Promoción del Trabajo Registrado y un régimen especial para pymes.
Sin embargo, respecto de estos últimos, la economista apuntó que “la baja de costos laborales no funciona sino hay activación de la demanda de las empresas”.