Los precios del crudo se dispararon por el desacuerdo entre los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus socios, a través de la alianza OPEP+.
El barril de WTI para entrega en agosto, de referencia en Estados Unidos, superó los 76,90 dólares por primera vez desde noviembre de 2014, y alcanzó 76,98 dólares.
El tanto, el de Brent del Mar del Norte para entrega en septiembre, de referencia en Europa, subió a 77,84 dólares por primera vez desde finales de octubre de 2018.
El mercado refleja la decisión que tomó el lunes la OPEP+ de posponer indefinidamente su cita telemática, por discrepancias internas.
Emiratos Árabes Unidos condiciona su apoyo a prorrogar la validez del acuerdo vigente -que vence en abril de 2022- a una subida de su cuota nacional.
Con su exigencia, mantiene bloqueado el pacto preliminar que alcanzaron Arabia Saudita y Rusia para aumentar cada mes el bombeo conjunto en 400.000 barriles diarios durante 14 meses (entre agosto de 2021 y septiembre de 2022).
El fracaso de las negociaciones podría conducir a que la producción no suba y hay temores por escasez de suministro, ante el incremento de la demanda de crudo que generó la reactivación económica en algunos países tras de la crisis provocada por la pandemia.