ESCUCHARLuego de la extensión de los plazos para liquidar ventas externas, ahora el Ministerio de Producción va por el alargamiento de los tiempos de prefinanciación y por créditos “post” para facilitar la recuperación de mercados
El Gobierno analiza medidas para agilizar la importación de máquinas y herramientas para la industria, como parte del paquete de trabajo que evalúa para terminar con las trabas burocráticas en la economía e impulsar exportaciones con nuevas líneas de financiamiento a las pymes por hasta 5 años de plazo, según anunció el ministro de Producción, Francisco Cabrera.
Éste, quien disertó en el seminario sobre “El rol de la Banca de Desarrollo en el Siglo XXI”, destacó el papel que cumplirá en este programa el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), organizador del encuentro, como “punta de lanza para la mejora de la productividad” en el país y “articulador fundamental en los proyectos de infraestructura asentados en la asociación público-privada”, cuyo nuevo marco legal fue tratado ayer por el Senado nacional.
“Fue un año duro para la Argentina, pero con un camino hacia la normalización de la economía que no ha tenido pausa y las perspectivas son muy buenas”, sostuvo Cabrera al inaugurar el encuentro, que sesionó el martes en el hotel Emperador, en el centro porteño, y que convocó a especialistas de España, Perú, Chile y Colombia, entre otros países.
El funcionario reveló en la oportunidad que en la última reunión del gabinete económico en la Casa Rosada se analizaron las vías para “bajar la burocracia” en distintas áreas.
Cabrera puso como ejemplo el caso de la importación de equipamiento de líneas de bienes de capital nuevas que no se fabrican en el país. “Son importantísimas para la competitividad de la economía, pero por un régimen especial la incorporación de esos equipos tardaba nueve años y la estamos bajando a 90 días”, dijo.
El ministro consideró luego que “el banco BICE no cumplía con su rol y se le hacía difícil insertarse en una economía desquiciada”.
Y señaló Cabrera: “Hay una expectativa altísima sobre el papel que tiene que cumplir el banco, porque el sistema financiero no se ha orientado al financiamiento productivo, y muchas de las 600 mil pymes existentes en el país no tienen acceso al financiamiento formal”.
El BICE, añadió el ministro, debe además facilitar “la integración argentina al mundo, luego de años de aislamiento, a través del financiamiento a las exportaciones”.
Pablo García, presidente del banco, anticipó a su vez que “estamos pensando en una nueva línea para financiar exportaciones a plazos de hasta cinco años”.
Hasta ahora, la institución otorga créditos de hasta un año de plazo por un monto máximo de 10 millones de dólares con tasas fijas de entre 3,5% y 4,5% hasta 210 días, y de entre 4% y 5,5% para plazos superiores.
Ya en agosto pasado, en el marco del IX Coloquio Industrial organizado por la Unión Industrial de Córdoba (UIC) en esa ciudad, Cabrera había anunciado además el lanzamiento de líneas de posfinanciamiento de exportaciones para facilitar la recuperación de mercados, a la vez que la extensión a 365 días del plazo para liquidar las divisas que ingresan por ventas al exterior. Hay que señalar que esta última medida se efectivizó ese mismo mes, con la resolución 242 de la Secretaría de Comercio publicada el 30 de agosto en el Boletín Oficial, que extendió el plazo de liquidación de divisas a 1.825 días corridos (5 años) para 96 categorías de productos comprendidos en el nomenclador Mercosur, es decir casi todos los productos.
García destacó la orientación del BICE hacia las pymes, con incentivos a la inclusión financiera para masificar y facilitar su acceso al mercado de capitales, incluyendo instrumentos de underwriting (prefinanciacion de títulos valores).
Destacó luego el caso de la línea de Primer Crédito pyme, por entre 500 mil y 5 millones de pesos, para financiar en hasta 84 meses proyectos de inversión y la adquisición de bienes de capital, y planes de reconversión y modernización productiva para firmas que no accedieron en los últimos 24 meses a un crédito bancario de largo plazo.
Otras asistencias del banco permiten brindar garantías, sin competir con la banca comercial ni realizar operaciones transaccionales.
El titular del BICE señaló que en los últimos años los bancos de desarrollo se concentraron en “atender fallas de mercado, para complementar los sistemas financieros”. Explicó que el banco “no necesariamente brinda financiamiento directo sino que a veces provee garantías o plataformas comerciales para completar los mercados”.
“Los bancos de desarrollo -agregó García- también estiran los plazos, al otorgar liquidez a la banca comercial, o bonifican tasas cuando las entidades financieras no logran internalizar el riesgo correctamente”.
