El Gobierno argentino determinó que las exportaciones de carnes y productos derivados deberán ser informadas e inscriptas, a través de una declaración jurada, en el Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA) que funciona bajo la órbita del Ministerio de Agricultura, con el objetivo de evitar posibles desequilibrios en cuanto a abastecimiento, precio y calidad.
Lo hizo a través de la resolución conjunta 3/2021 de los ministerios de Agricultura y de Desarrollo Productivo, publicada en el Boletín Oficial.
La misma indicó que el registro mediante la Declaración Jurada de Exportaciones de Carnes (DJEC) tiene por objetivo evitar posibles desequilibrios en el mercado interno de la carne en condiciones de abastecimiento, precio y calidad; así como también transparentar las operaciones de venta de carne al exterior, evitar subfacturaciones y triangulaciones con países vecinos.
Asimismo, mediante una Comisión Mixta de Seguimiento, que estará integrada por la Secretaría de Comercio Interior, la Subsecretaría de Mercados Agropecuarios y la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), se relevarán y propondrán los precios mínimos de referencia para las exportaciones, y se evaluará periódicamente la evolución de los mismos.
Además, una Comisión Fiscalizadora, de la que participará el Banco Central (BCRA), evaluará entre otras cosas el correcto ingreso de divisas al país.
Los productos cárnicos a exportar alcanzados por la DJEC son la carne fresca, refrigerada o congelada de las especies bovina, porcina, ovina, caprina, equina y gallus domesticus (avícola).
La autoridad de aplicación de esta resolución será la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario, que mantendrá un permanente intercambio de información con la Secretaría de Comercio Interior.
Entre sus facultades, deberá determinar el procedimiento y el plazo de vigencia de la DJEC, dictará las normas complementarias para una adecuada implementación de la medida y dictará las normas aclaratorias que sean necesarias.
Además, se implementará un sistema informático para la puesta en funcionamiento de este sistema.
La Secretaría de Comercio Interior tendrá a su cargo confrontar la DJEC con las condiciones de abastecimiento del mercado interno, respecto al volumen, calidad de los cortes de carne y los subproductos.
También se creará la Comisión Mixta de Fiscalización, que estará integrada por Comercio Interior, Control Comercial Agropecuario, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), y el Banco Central.
Tendrá entre sus funciones verificar y fiscalizar el cumplimiento de esta medida, y en el caso de detectar algún incumplimiento podrá suspender de inmediato al operador del RUCA con independencia de las sanciones que les pudieran corresponder a los infractores por aplicación de las diferentes normativas involucradas.
El nuevo registro entrará en vigencia a partir de los cinco días hábiles desde que la autoridad de aplicación implemente el procedimiento y el sistema informático, y seguirá en vigencia mientras dure la emergencia pública en materia sanitaria declarada por la Covid-19.