Ya hubo cuatro alzas de naftas desde octubre pasado. Y el gasoil podría subir nuevamente este mes por los cambios en el precio del biodiésel. En el desagregado de costos del año pasado, los peajes lideraron con una suba de 42%, seguidos por gastos generales (40%) y patentes (35%)
Un nuevo incremento en el combustible, insumo central del transporte de cargas, motivó una nueva suba en el Índice de Costos Logísticos de febrero de 2018, que según la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (Fadeeac) se fijó en 1,85%. Así, los gastos que las empresas deben paliar siguen en suba en lo que va del año y en los últimos seis meses treparon 14%.
De acuerdo con la federación, una gran porción del aumento de costos tiene estrecha vinculación con el comportamiento del combustible en el mercado interno, que en febrero trepó 3,07%. Esta suba es la cuarta desde octubre de 2017. Desde entonces, acumula un incremento de 24 puntos porcentuales, lo que supera las proyecciones de inflación minorista para este año.
Y ahora, el biodiésel
A su vez, la resolución del Ministerio de Energía nacional conocida ayer, que dispuso un aumento de casi 15% en el precio del biodiésel, promete aumentar la presión sobre el precio de los combustibles, en este caso el gasoil, que por litro lleva hasta 10% de biodiésel como componente.
“Un alza de esa magnitud debería implicar un incremento de 1,5% en el precio del gasoil al público”, especulan en el sector. Sin embargo, la medida oficial tiene la particularidad de fijar nuevos valores para el biodiésel para enero, febrero y el corriente mes, de modo que las petroleras tienen que pagar el aumento que corre desde ayer más lo que adeudan de los dos primeros meses del año, con lo cual “no está claro de cuánto podría ser el incremento final en el precio” del gasoil.
El actual esquema de conformación del precio interno de los combustibles surge principalmente a partir de las variaciones del crudo internacional (Brent) y del tipo de cambio, además de los impuestos y el precio de los biocombustibles.
Dicho esquema de desregulación del mercado de hidrocarburos vigente desde fines de 2017 tuvo como antesala el acuerdo de precios internacionales suscripto entre las firmas petroleras y el Ministerio de Energía, que vincula el precio interno con el precio internacional y el tipo de cambio. Así, cualquier variación de estas principales variables impacta en forma directa en el precio del gasoil.
Pero a pesar de la baja en el precio internacional del petróleo en la última semana del mes pasado, “no hay indicios de que esto se refleje en precios locales más bajos”, según Fadeeac. Por el contrario, aseguran que “Argentina continúa manteniendo los precios del gasoil en dólares más altos de la región, con excepción de Uruguay y con una diferencia de casi nueve por ciento con Brasil y de 24% con Chile”. Por supuesto, por encima de esos países.
En lo que respecta al índice general durante el primer bimestre del año se destacan, además del aumento anual por patentes del 30,7%, la suba de los combustibles de ocho por ciento, la del costo financiero de 7,5% y la del material rodante que fue del 6,2%.
En el incremento desagregado en 2017, lideraron los aumentos los peajes con 42,2%, en el marco de los fuertes ajustes en el tránsito desde y hacia la Ciudad Autónoma de Buennos Aires, seguido por los gastos generales en 40%, las patentes en 35% y el costo financiero en 29,7%.
El índice mide cada mes 11 rubros que impactan directamente en los costos de las empresas de transporte de cargas de todo el país, y es referencia en buena medida para la fijación o ajuste de las tarifas del sector. Es elaborado por el Departamento de Estudios Tributarios y Costos de la Federación.
Bajo este escenario, la Fadeeac subraya que el sostenido aumento de los costos para transportar mercadería en el país tiene el agravante de sumar una carga impositiva del orden de 40% que conspira contra la competitividad del sector.
“El transporte de cargas es un eslabón fundamental en la economía del país. Sin embargo, sobre él recae el peso de los costos laborales, de infraestructura, de combustible, y el más abultado: el impositivo”, señala la federación de transportistas nacionales.
Aumentos 2017
En el incremento desagregado en 2017 lideraron los aumentos los peajes con 42,2%, empujados por las subas en Buenos Aires.
Siguen los gastos generales (40%), las patentes (35%) y el costo financiero (29,7%).
Aparte, los empresarios que manejan flotas de camiones denuncian el aumento permanente en los impuestos sobre patentes y otros vinculados con la actividad comercial.