En el país, se generan más de 40 mil toneladas diarias de residuos sólidos urbanos. De este total, 75% es vertido a los rellenos sanitarios, ríos o mar. Los envases son mayoría
Unas 30 mil de las 40 mil toneladas de residuos sólidos urbanos (RSU) que no tienen calificación de peligrosos, generados en domicilios, comercios y oficinas diariamente en el país son vertidas a los rellenos sanitarios o llegan a los ríos y el mar, mientras que unas 10 mil son recuperadas por cartoneros.
Se estima que más de 21 por ciento de estas 40 mil toneladas que se producen diariamente son envases. No obstante, no han prosperado ninguno de los proyectos presentados en el Congreso Nacional para aprobar una ley que regule su generación y disposición final.
Los datos surgen del proyecto de ley presentado por la diputada Alcira Argumedo en septiembre pasado para crear un Sistema Nacional de Gestión de Envases, que hasta ahora no fue evaluado por las comisiones pertinentes.
Por la ausencia de una ley de envases en Argentina, las tasas de reciclaje de plástico son muy bajas comparadas con las de otros países.
En Alemania, donde rige una ley de “sistema de retorno” desde octubre de 2003, se alcanzó una tasa de reciclaje de envases de 98,5%; mientras que Dinamarca, que implementa una norma similar desde 1991, registra índices de reciclaje de 99,5% para botellas de cerveza y gaseosas y 99,5 para PET reutilizable.
La situación nacional
En Argentina, mientras tanto, las tasas de reciclaje posconsumo de plástico son de 24%, según la Cámara Argentina de Industrias Plásticas (CAIP). El ministerio de Ambiente de la Nación no cuenta con estadísticas al respecto.
“Nos interesa que se trate una ley porque una gran cantidad envases saldría de circulación, el fabricante se haría cargo de procesarlos una vez consumido su contenido y de que vuelvan a la cadena de producción”, comentó Diego Albareda, del departamento de Conservación del Ecoparque de Buenos Aires.
Desde 2005, el equipo de conservación del Ecoparque rehabilita y estudia tortugas marinas provenientes de varamientos o captura incidental en las costas bonaerenses, y encontró restos de plástico en 97 de cada 100 animales.
Proyecto
En septiembre último, Argumedo, junto con la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores -que agrupa unas 70 cooperativas- y otros legisladores, presentaron en el Congreso Nacional un proyecto de ley para crear un Sistema Nacional de Gestión de Envases.
El proyecto establece un presupuesto mínimo para la gestión de estos residuos “a fin de prevenir y reducir su impacto ambiental disminuyendo la cantidad que se insertan en el mercado, minimizando su disposición final en rellenos sanitarios y priorizando la reutilización y el reciclado”.
La iniciativa no fue evaluada por ninguna de las tres comisiones parlamentarias que deben aprobarla (Ambiente, Asuntos Cooperativos y Presupuesto) para su posterior debate en el recinto, señaló la diputada.
CAIP le dijo a Télam que acompañaría la implementación de un “Sistema Integrado de Gestión” público-privado que se financie “mediante el aporte de los envasadores”.
Según la propuesta de CAIP, los envasadores pagarían un monto por cada producto envasado puesto por primera vez en el mercado y, en función de los diferentes tipos de envases y materiales que los componen, cuanto más fácilmente reciclable sea el envase, menor será la suma .
Además del proyecto de Argumedo, existen en la Cámara de Diputados otros dos, uno presentado por la diputada María Emilia Soria (FpV Río Negro) y un tercero elaborado por Guillermo Snopek (PJ Jujuy).