El nuevo estudio del Global Impact Investing Network (GIIN) es la primera encuesta que evalúa el estado de la medición y gestión del impacto (IMM) en la industria de la inversión de impacto. La principal conclusión que destaca el estudio es que las motivaciones de los inversores de impacto para avanzar en procesos de medición de resultados es la rendición de cuentas a sus grupos de interés.
Según el estudio, la mayoría de los inversores de impacto encuestados mide los resultados (91%) -los productos directos de las actividades de una organización- y los cambios (77%) que resultan de las actividades y resultados de sus inversiones.
Los criterios de medición que usan estos inversores abarcan la amplitud (el alcance del impacto entre grupos de personas o ecosistemas); la adicionalidad (el impacto positivo que de todos modos no hubiera ocurrido sin la inversión); y la profundidad (la importancia del impacto para las personas o ecosistemas).
Todos los encuestados, excepto uno, informan su impacto a los grupos de interés. Específicamente, 69% informa su impacto a los donantes o inversionistas, y 56% incluye los resultados de rendimiento de sus inversiones de impacto en sus informes financieros. Además, 40% o más de los encuestados produce informes de impacto disponibles para el público en general.
¿En qué se invierte?
La investigación destaca que los inversores de impacto trabajan en distintos asuntos de la sustentabilidad y buscan crear distintos tipos de impacto. Una gran mayoría de los inversores (79%) apuntan a más de un tema de impacto y todos se presentan como alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. La mayor proporción de la muestra apoya asuntos relacionados al empleo decente y el desarrollo económico (24%). Además, 16% trabaja en “acción climática”, seguido de “ciudades y comunidades sostenibles” (11%).