Costas por su orden y sin honorarios para el síndico

La Cámara multifuero de Villa María consideró que fue razonada la determinación de los estipendios y que el síndico tuvo una actuación limitada, al presentar sólo un informe La Cámara de Apelaciones en lo Civil, Comercial, Familia y Contencioso-administrativo de la ciudad de Villa María confirmó la resolución de primera instancia que ordenó las costas por el orden causado en la verificación de un crédito tardío, y también ratificó la no regulación de honorarios independientes al síndico porque en esta etapa sólo limitó su actividad a presentar un informe sin ser parte del incidente. [privado] El tribunal integrado por los vocales Alberto Ramiro Domenech, Augusto Gabriel Cammisa y Luis Horacio Coppari, al analizar el agravio relativo a la distribución de costas en primera instancia, sostuvo que el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) “ha aclarado que no hay una norma expresa que regule cómo deben imponerse las costas en los incidentes de verificación tardía como el aquí ventilado”. Añadió que el TSJ también ha expuesto que tampoco puede establecerse una regla absoluta sobre cómo imponerlas cuando el acreedor tardío no negligente resulta vencedor, haciendo hincapié en que es el juez de la causa “quien está en mejores condiciones para dirimir el punto, teniendo en cuenta las particularidades del caso”. Bajo esa premisa, el tribunal villamariense indicó que el análisis expuesto permite concluir que el tribunal de primera instancia no decidió contra derecho al no haber impuesto costas al acreedor, por el incidente de verificación tardío planteado por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) pues: a) la Ley de Concursos y Quiebras (LCQ) no contiene una disposición legal expresa que prescriba imponer las costas al acreedor tardío; b) si bien existe una regla jurisprudencialmente aceptada en orden a que las costas sean impuestas al verificante tardío, se ha establecido que no es absoluta; y c) la resolución satisfizo la exigencia de fundamentación en tanto, como se expuso, se brindaron las razones por las cuales la presentación tardía no era imputable a la acreedora y asimismo se valoró que el deudor no se opuso. Por las razones expuestas, resolvió que “el agravio es improcedente”. Queja Luego, en cuanto a la queja del síndico por la no regulación de honorarios, los jueces sostuvieron que, “según el criterio del TSJ, cuando la verificación tardía del crédito se produce durante el concurso, el síndico no tiene derecho a una regulación de honorarios independiente porque no es parte en el incidente, limitándose su tarea a la emisión del informe previsto en el art. 56 de la LCQ -como se ha expuesto más arriba-, a diferencia de lo que ocurre en la verificación tardía que se produce en el marco de la quiebra, en la que se le reconoce tal derecho porque se posiciona como parte”. Asimismo, la alzada recordó que el juez de primera instancia tuvo en cuenta que el dictamen del síndico no difirió del que hubiera debido elaborar en el supuesto de que la acreedora se hubiera insinuado tempestivamente, y asimismo que debió ser notificado en dos oportunidades a los fines de que presentara el informe, en el que puso más empeño en el tópico costas que en la tarea encomendada. Por todo ello, rechazó el agravio. Autos: “ROMERO, MIGUEL ÁNGEL – CONCURSO PREVENTIVO – VERIFICACIÓN TARDÍA DE CRÉDITOS PROMOVIDA POR LA ADMINISTRACIÓN FEDERAL DE INGRESOS PÚBLICOS” (Expte. Nº 2700138) [/privado]

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