ESCUCHARLa aplicación efectiva del proyecto de Presupuesto 2020, que incluye un aumento de los recursos de 48,5%, dependerá de las políticas del próximo gobierno, dada la «elevada incertidumbre» por el proceso electoral en curso, señaló un informe de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP).
El proyecto contempla una recaudación de $5,3 billones en concepto de recursos corrientes y de capital. «En términos generales, puede considerarse que la estimación de recursos incluida en el proyecto de presupuesto 2020 es coherente con el conjunto de supuestos de carácter macroeconómico y de legislación tributaria empleados para su confección», apuntó el informe de la ASAP. «Sin embargo, la cuestión central a tener en cuenta al analizar el cálculo de recursos es la elevada incertidumbre acerca de la evolución de los agregados macroeconómicos que genera la actual situación económico-política», se observó. En este sentido se señaló que «si se adiciona, a la ya de por sí endeble situación económica, la incertidumbre política que generan las próximas elecciones, se desprende que el presente cálculo de recursos dependerá de las politicas que implemente el gobierno que gane las elecciones».
Asimismo, ASAP indicó que el proyecto presupuestario calcula un crecimiento de 1% del PBI, con una recuperación de la economía que revertiría la recesión proyectada para este año. No obstante, este escenario es objetado por consultoras y economistas que prevén para 2020 una nueva caída de la actividad económica: «Las exportaciones liderarían el proceso de crecimiento de 2020, producto del incremento del tipo de cambio real multilateral desde mediados de este año, como así también el crecimiento de los principales socios comerciales, principalmente Brasil, cuya estimación es del 2,1% el año próximo», precisó ASAP y agregó: «También se registrarían mejoras en las exportaciones energéticas de la mano del desarrollo de Vaca Muerta y un crecimiento en las exportaciones manufactureras de origen agropecuario debido a la apertura de nuevos mercados».
En tanto, prevé que el incremento del consumo privado estará dinamizado por la recomposición del empleo y la masa salarial, y la reapertura de paritarias. «Sin embargo, la turbulencia cambiaria observada a partir de agosto plantea interrogantes sobre la posibilidad de que se produzca la recuperación proyectada. El salto del tipo de cambio observado recientemente tendrá aparejado un incremento en la inflación, con la consecuente caída en el poder adquisitivo de los asalariados», concluyó la entidad.
