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El poder de compra de sueldos públicos y jubilaciones de Córdoba cayó 9,5% promedio en un año

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Los haberes de los agentes provinciales perdieron 7,3% y los pasivos, 11,75%. El cálculo para los primeros es a marzo y, para los segundos, a abril. Si bien el porcentaje puede variar conforme la fecha de corte que se tome por los aumentos escalonados aplicados, sirve como referencia general sobre su evolución. Fuerte suba de los no remunerativos.
Cómo les fue a jueces, municipales, bancarios y EPEC. Dudas por nuevo aumento paritario

 

Alfredo Flury [email protected]

Los salarios de los empleados públicos provinciales se incrementaron en promedio 36,3% en el último año mientras que el haber jubilatorio promedio subió 29,7%. De esta forma, el poder adquisitivo de ambos cayó 7,3 y 11,75%, respectivamente.

Los datos elaborados por Comercio y Justicia toman como referencia la información oficial difundida por la Caja de Jubilaciones de Córdoba, tanto para activos como pasivos.

En el caso de los primeros, el último dato disponible es a marzo mientras que para los jubilados incluye abril.

Respecto de la inflación, a marzo pasado alcanzaba 47,07% interanual. En tanto, si bien el dato a abril recién se conocerá hoy, la referencia para el cálculo fue también en torno a 47%.

Con esos insumos, el cálculo de la evolución real de los salarios y jubilaciones muestra, con matices, una caída en los últimos 12 meses.

Concretamente, todos los aportantes a la Caja de Córdoba mostraron caídas reales, excepto los bancarios.

El análisis, con todo, no deja de ser un recorte parcial de la realidad. Sucede que de, según qué mes se tome como corte para efectuar la comparación, los porcentajes varían. Las diferencias surgen en función del impacto de los sucesivos aumentos escalonados aplicados por el Gobierno a los agentes públicos y también por la Caja a los jubilados.

Sin embargo, en cualquier caso, los números muestran en general una pérdida del poder adquisitivo de ambos ingresos.

Es muy probable que esa caída se acentúe en los próximos meses, ya que -si bien la inflación en los últimos dos meses se desaceleró- muy probablemente encuentre un piso en torno a dos por ciento difícil de perforar. La inusitada emisión monetaria para paliar la crisis podría generar algún impacto en precios en el segundo semestre, aunque esa proyección es aún incierta.

También, la escalada de los dólares financieros y el blue, que ayer tocaron valores récord y ampliaron la brecha con el oficial.

Mientras, las paritarias están de hecho suspendidas, por lo que los salarios -muy seguramente- seguirán perdiendo poder adquisitivo.

En el caso de los estatales provinciales, el Gobierno debe pagar con los haberes de mayo una mejora de 5% como parte el acuerdo salarial para la primera mitad del año. En tanto, en julio se suma otro porcentaje similar.

Por el momento, en el Ejecutivo hay hermetismo respecto a la posibilidad de afrontar ese aumento. Sin embargo, son evidentes las dificultades para pagar en tiempo y forma los sueldos. Ya ocurrió con los haberes de abril. Córdoba volverá a necesitar ayuda extra de la Nación para llegar con los recursos, a tenor de una persistente caída de la recaudación, producto del parate por la cuarentena.

En tanto, ayer, el Foro de Intendentes Radicales pidió a la Provincia que otorgue créditos a tasa cero para poder pagar los salarios de mayo, señal evidente de su crítica situación.

La evolución de los salarios

En cuanto a la trayectoria de los sueldos estatales en el último año, hubo algunas variantes entre cada sector en el marco del período de referencia, básicamente entre los docentes y el resto. Ocurre con los educadores firmaron la paritaria luego que el resto de los agentes de la Administración central por lo que su salario a marzo aparecía aún rezagado, previo a que percibieran el retroactivo a febrero tras rubricar su acuerdo.

Concretamente, a marzo pasado, los 79.779 educadores aportantes al sistema previsional cobraron un sueldo bruto promedio de 46.055 pesos, 28% más que un año atrás. La pérdida del poder de compra de esos salarios fue, a esa fecha y en la comparación interanual, de 12,93%.

Más realista es el caso de los agentes de la Administración Pública y organismos descentralizados y también del personal de Seguridad, cuyos sueldos ya reflejaban en marzo el primer escalonado del aumento paritario de este año. En el caso de los primeros, el salario bruto promedio de los 38.277 empleados era de 68.087 pesos, 36,25% mayor a un año atrás. En cuanto a los 25.277 policías y penitenciarios, cobraron 76.338 pesos, 36,31% más que en 2019. La pérdida del poder adquisitivo fue en promedio para ambos casos de 7,3%.

Pero hubo otros trabajadores a los que les fue aún peor. Los 3.748 empleados de la EPEC cobraron 135.443 pesos, 19,95% por encima del año pasado. Perdieron 18,4% con relación al año anterior.

En tanto, los 10.445 municipales de la ciudad de Córdoba nucleados en el Suoem percibieron 142.089 pesos, 45,73% más que en 2019. Esa mejora implicó una caída del salario real de 4,3%.

Por su parte, los 2.385 magistrados y funcionarios del Poder Judicial cobraron 271.377 pesos promedio en marzo, siempre como salario bruto, 38,81% superior a 12 meses atrás, 5,2% de caída real.

Finalmente, los únicos que le ganaron a la inflación fueron los bancarios. Son 3.189 empleados que percibieron un promedio de 151.074 pesos, 52,66% por encima de lo cobrado el año anterior. De esta forma, la mejora en el poder de compra de los salarios de los bancarios fue de 3,85%.

No remunerativos

Más allá de la caída del poder adquisitivo de los salarios del sector público que aportan a la Caja y que de hecho no difiere sustancialmente de la baja general de los sueldos en toda la economía, llama la atención en el caso de la Provincia los muy elevados montos no remunerativos que cobran los agentes. Pero también ocurre en la Municipalidad de Córdoba, de hecho ahora de manera muy acentuada.

Esos recursos no están sujetos a aportes jubilatorios por lo que no aparecen reflejados en los datos de la Caja. De hecho, este medio debió gestionar la información para poder hacer comparaciones realistas respecto a la evolución de los salarios.

Según los números oficiales son elocuentes y muestran como fueron creciente los pagos en negro en el último año.

Por ejemplo, los empleados de la Administración Pública y organismos descentralizados cobraban el año pasado 2.683 pesos promedio de no remunerativo y ahora perciben 4.958 pesos., casi el doble.

En el caso de los docentes, cobraban 3.153 pesos y ahora 5.043 pesos.

En tanto, el personal de seguridad percibía 11.040 pesos y en marzo último cobraron 17.944 pesos.

Como salvedad, hay que señalar que parte de los no remunerativos se perciben por conceptos determinados, por ejemplo en el caso de los docentes material escolar o también para los policías. Sin embargo, en el último año, los incrementos fueron como parte del salario corriente y para neutralizar la baja del poder adquisitivo  de los sueldos frente la inflación.

Legalmente, el Gobierno provincial no está habilitado a pagar sumas “en negro”. Sin embargo, las circunstancias llevaron a que tanto el Ejecutivo como los gremios avalaran esa posibilidad.

Con todo, la que más aumentó el porcentaje de pagos no remunerativos es la Municipalidad de Córdoba. El año pasado, los agentes comunales cobraban en promedio apenas 609 pesos en negro. En marzo pasado, esa cifra se disparó a 20.062 pesos, sobre los 142.089 pesos en bruto del salario de los municipales.

El aumento de los no remunerativos en el salario se produjo por un acuerdo entre la administración de Martín Llaryora y el Suoem como para mantener activa la cláusula gatillo en su última etapa de aplicación, hasta enero pasado inclusive.

También los bancarios -paritaria nacional-, los empleados de EPEC y los magistrados cobran no remunerativos. En el caso de estos últimos, percibían 17.576 pesos el año pasado y ahora cobran 23.622 pesos no sujetos a aportes.

Las jubilaciones, peor

Pero si el salario de los activos cayó en términos reales, más lo hicieron las jubilaciones.

De acuerdo a los datos de abril publicados por la Caja, el haber promedio alcanzó 57.853 pesos, 29,7% superior al erogado en el mismo mes del año anterior.

De esta forma, el poder adquisitivo del haber previsional de Córdoba se redujo 11,75%en relación a un año atrás.

La caída real de las jubilaciones de Córdoba ya se venía perfilando desde hacía tiempo luego de la suspensión de la denominada cláusula gatillo que beneficiaba a los trabajadores activos pero que también impactaba en los pasivos.

Sin embargo, esa indexación dejó de aplicarse ya desde septiembre pasado. Desde entonces, las subas fueron en parte no remunerativas y alcanzaron parcialmente a los jubilados.

Con todo, esa baja persistente en el poder de compra de los beneficios previsionales, registró en abril un dato ineludible. Por primera vez en décadas, parte de las jubilaciones bajaron porque se redujo el sueldo del Gobernador.

Efectivamente, si bien antes hubo impacto en los haberes de los pasivos por ajustes aplicados por la Caja que incluso pospuso por 180 días las subas vigentes para los activos, ahora directamente se produjo una reducción en 9.035 jubilaciones, 8,32% del total.

Mediante el decreto N° 255/2020 del Poder Ejecutivo, Juan Schiaretti estableció una reducción de 45 por ciento en su retribución mensual y dispuso que ningún funcionario de planta política pueda percibir un salario bruto superior al monto resultante de dicha reducción. Posteriormente, la Legislatura acompañó la medida, recortando sus haberes en la misma proporción (decreto N° 63/2020).

La medida generó dos impactos. Por un lado, implicó la reducción de haberes de los beneficiarios comprendidos en los sectores “Autoridades y funcionarios del Poder Ejecutivo y del Poder Legislativo” debido a la baja de las remuneraciones de los activos. Por otro lado, trajo aparejada la actualización del tope jubilatorio (definido como el 82% del sueldo bruto del Gobernador neto del aporte personal del sistema previsional nacional que llega al 11%), pasando el límite a partir del cual se aplica la deducción de hasta el 10% del haber, de 201.434 a 110.789 pesos en abril.

La decisión generó una reducción del gasto previsional mensual del orden de los 95,8 millones de pesos, esto es 1,6% del total mensual que eroga la Caja.

 

 

 

 

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