ESCUCHARLlegó a 887.568 unidades- Hasta junio se habían incorporado sólo 10.201 vehículos. De mantenerse la tendencia que en rigor se estima será decreciente, se habrán sumando menos de la mitad que el año pasado y sólo por encima de los 16.768 de 2005. La caída más drástica, en camiones
La incorporación de vehículos al parque automotor de la ciudad de Córdoba registrará en 2019 la peor cifra desde 2005.
Así se desprende de los datos estadísticos publicados por la Municipalidad de Córdoba en el marco del compendio “Córdoba, una ciudad en cifras”, resumen de las principales variables económicas, sociales y demográficas de la ciudad capital.
Según esos números, al 30 de junio pasado, el municipio tenía registrados 887.768 vehículos, apenas 10.201 más que al cierre de 2018.
De mantenerse la dinámica de incorporación en el segundo semestre del año, 2019 debería cerrar con unas 20 mil unidades. No obstante, se descuenta que la inscripción de vehículos en la segunda mitad del año será menor a la primera. Es que si bien debería haber algún repunte tras el denominado Plan Junio que el Gobierno nacional lanzó a mediados de ese mes como plan de incentivos para la compra de cero kilómetro con subsidios oficiales, el programa no tuvo una incidencia crucial y se desinfló a mediados de agosto luego de las elecciones PASO y a partir de la fortísima devaluación del peso registrada entonces.
En ese marco, nada hace suponer que la venta de vehículos mejore en el último tramo del año, en una economía que atraviesa una profunda recesión.
Aún así, y suponiendo que la incorporación de unidades repita en el segundo semestre la performance del primero, las 20 mil unidades de 2019 se ubicarán 56,14 por ciento por debajo de las 45.609 registradas en 2018.
Se trata, por cierto, de la cifra más baja exhibida por la gestión de Mauricio Macri. En 2017 se verificó la mayor incorporación con 49.141 vehículos. Así, 2019 se ubicaría 59,3 por ciento por debajo de ese año.
En tanto, la baja será del 62,83 por ciento si se la compara con el mejor año histórico de la serie que fue 2013. En aquel año se incorporaron 53.810 unidades al parque automotor de la ciudad. La serie informada por la Municipalidad de Córdoba se mide desde 1993.
El piso se produjo en coincidencia con la crisis de 2001 y 2002, tras la caída de la Convertibilidad. Concretamente, en 2002, la incorporación de vehículos fue de apenas 2.908 vehículos, luego de un pico de 19.294 en 1994.
Camiones, por el piso
En el repaso por tipo de vehículo, llama la atención la contundente caída de muestra la inscripción de camiones. En los primero seis meses del año, se habían anotado apenas 35 unidades. Si esa cifra se replicara en el segundo semestre, serán sólo 70 en el año. El número será 80,28 por ciento inferior a los 355 registrados en 2018 y 84,78 por ciento menor respecto al récord de 460 camiones de 2011.
Para encontrar una cifra menor, hay que remontarse a los 60 vehículos de 2003 o a los 42 camiones de 2002, en plena crisis pos Convertibilidad. El parque automotor de esa categoría a la fecha llega a 12.345 unidades.
En cuanto a los vehículos livianos, hasta junio se habían sumado 6.239 autos. Si el año concluye con el doble, esto es 12.500, la cifra será 52,41 por ciento menor al año pasado cuando se registraron 26.271 unidades. Se trata de la más alta desde la medición de la serie en 1993.
En cuanto a un registro menor al de este año, recién se verifica uno en 2006 cuando llegó a 11.412 vehículos. Al 30 de junio se contabilizaban 503.708 unidades de vehículos livianos.
En relación a las motos, suman un total de 263.845 en Córdoba.
Hasta junio se habían registrado 2.608 unidades por lo que 2019 podría terminar con unas 5.600. Se trata de 57,95 por ciento menos que en 2018. Con todo, si la comparación es respecto al récord de 21.447 unidades de 2011, la caída llega al 73,88 por ciento.
Una cifra similar a la de este año recién hay que rastrearla en 2005 cuando se contabilizaron 5.454 motos. En tanto, en 2002 se observó la menor incorporación con apenas 98 unidades.
Finalmente, las pickups mostraron a junio un acumulado de 74.751 unidades. Hasta esa fecha y en los primeros seis meses del año se habían incorporado 819 por lo que el año podría concluir con 1.640 vehículos. Ese número se situaría 53,19 por ciento por debajo de 2018 y 64,7 por ciento menor que las 4.646 camionetas incorporadas en 2007, año en que alcanzaron el récord.
Una vez más, una cifra en línea con la que se observará este año, hay que buscarla recién en 2006 cuando se sumaron 1.585 al parque automotor de la ciudad.
Por lo demás, la estadística oficial muestra datos de otras categorías, aunque con incidencia marginal respecto al total.
Así, en el compendio figuran acoplados, semiremolques, camión tractor, ómnibus urbanos, taxis y remises, furgón, coupé, casas rodantes y cuatriciclos.
Suspensiones en las terminales
La caída en la incorporación de vehículos al parque automotor informado por la Municipalidad de Córdoba, impacta de lleno en la baja en las ventas y también en la demanda de producción de las terminales automotrices.
Si bien buen parte de los vehículos que se venden en Córdoba es de origen importado, la baja en los patentamientos también golpea fuerte en las fabricantes.
En ese marco, Fiat continúa con un fuerte plan de suspensiones que en septiembre apenas incluyó cuatro días de trabajo. Aún no se informó como sigue el panorama de octubre. Igual, no se esperan cambios de peso a tenor de que la situación en el país y en Brasil, principal destino de la producción de la planta de Ferreyra, sigue sin reacción.
En tanto, Renault también acusa problemas. De hecho, el viernes se conoció que resolvió despedir a 37 trabajadores de diferentes áreas.
Por su parte, Iveco sigue con serios problemas de producción en su planta de fabricación de camiones en Córdoba.
La única que mantiene su ritmo de trabajo es Volkswagen que produce cajas de velocidad y que se exportan casi en su totalidad.
Mientras tanto, también el viernes se conoció la decisión de la autopartista MWM de cerrar su planta en Jesús María y desvincular a 89 empleados, a 25 años de su desembarco en Córdoba.
Paulo Moura, directivo de la empresa en Argentina, admitió ante los trabajadores que el motivo principal de la decisión fue la incertidumbre política generada por el resultado de las elecciones primarias (PASO), junto con la devaluación y el efecto inflacionario. (ver pagina 4).
