Por mayoría, la Corte Suprema rechazó el último recurso que había presentado la defensa en contra del fallo que lo responsabilizó por negociaciones incompatibles con la función pública, en octubre de 2015
El 29 de octubre, el ex intendente de Córdoba Germán Kammerath fue detenido y trasladado al penal de Bouwer, en cumplimiento de la pena que se le impuso, de tres años y medio de prisión, por la comisión del delito de negociaciones incompatibles con la función pública durante su mandato, entre 1999 y 2003.
El arresto se concretó luego de que la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por mayoría, rechazó por inadmisible el último recurso que promovió su defensa en contra de aquella condena.
El voto mayoritario lo firmaron los jueces Horacio Rosatti, Ricardo Lorenzetti y Elena Highton.
En tanto, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda se pronunciaron en disidencia, al estimar que en la causa se violó la garantía del plazo razonable para dictar sentencia.
Rosenkrantz describió que la instrucción se inició en 2003, que el expediente se elevó a juicio en 2006 y que el proceso oral -después de una serie de tiempos muertos- sólo se hizo en 2015, sin que mediaran maniobras dilatorias por parte de la defensa.
Los supremos Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda votaron en disidencia, subrayando que en el caso se violó la garantía del plazo razonable para dictar sentencia.
El magistrado consideró que no cabía poner en cabeza del acusado la responsabilidad por no haber instado el fallo.
En coincidencia, Maqueda planteó: “Resulta descalificable el fundamento por el que el tribunal rechazó que se hubiera afectado la garantía de la duración razonable del proceso y por eso no es válida su sentencia”.
El cordobés recordó que tribunales internacionales y europeos consideran que un modo de remediar la violación de aquélla es la reducción del término de la pena privativa de la libertad o la suspensión de los procedimientos y, en esa linea, concluyó que correspondía descalificar lo resuelto por el tribunal de juicio.
Luis Juez
Kammerath fue denunciado por su sucesor, Luis Juez, en la causa conocida como “Radioaviso”, y responsabilizado penalmente en octubre de 2015.
El caso giró alrededor de la contratación irregular de un servicio de seguimiento satelital para toda la flota de vehículos municipales.
El beneficiario de ese vínculo fue Marcos Aurelio Álvarez, ex cuñado de Kammerath y ex gerente de Control de la Comisión Nacional de Comunicaciones.
En abril de 2018, el Tribunal Superior cordobés confirmó la condena a tres años y medio de prisión. En esa oportunidad, rechazó la casación que habían interpuesto los defensores del ex funcionario.
Kammerath fue diputado nacional entre 1993 y 1996; intendente de Córdoba entre 1999 y 2003 y vicegobernador de José Manuel de la Sota entre julio y diciembre de 1999. Antes, había sido secretario de Comunicaciones de Carlos Menem (agosto de 1996 – julio de 1999) e interventor de ATC (diciembre de 1995 – julio de 1996).