La realidad actual de las distintas organizaciones demuestra la imperiosa necesidad de contar con información valiosa para la toma de decisiones; en la que todo sistema de información y gestión debe ser un traje a la medida de los requerimientos de la entidad y nunca una camisa de fuerza que limite la funcionalidad de las decisiones que se puedan tomar.
Por la Comisión Asesora de de Profesionales en Relación de Dependencia del CPCE Córdoba
No existe un mejor contexto en que el valor y el alcance de contar con un profesional en ciencias económicas eficiente sea tan grande como se permita imaginar.
Muchas veces existen personas que asumen la tarea de ser sus propios contadores, o de contratar idóneos en sus organizaciones porque creen que así ahorrarán dinero. Sin embargo, los elevados riesgos que hoy se corren revalorizan la tarea de los contadores públicos, licenciados en economía, licenciados en administración y demás profesionales de las Ciencias Económicas, por el valor del conocimiento y experiencia que aportan y porque son quienes están especialmente formados para asesorar en sus diversas áreas de incumbencia.
Contar con profesionales matriculados tiene, entre otros aspectos, múltiples beneficios y ventajas.
Desde el punto de vista de la organización
Las organizaciones actuales necesitan de profesionales proactivos, capaces de resolver por sí los problemas que van surgiendo día a día en ellas y que busquen soluciones antes que los problemas sean tales.
Ese importante respaldo al responsable de la organización lleva a que se convierta en su decisión más acertada invertir en profesionales matriculados y contar a su vez con el Consejo Profesional de Ciencias Económicas como Institución que regula su ejercicio profesional, ya que les brinda herramientas y asesoramiento para que el empleado se encuentre permanentemente capacitado y pueda desarrollar su actividad en un marco de responsabilidad y ética profesional.
Desde el punto de vista del propio profesional
La matrícula constituye una de las formas de jerarquizar la profesión; implica derechos, obligaciones y responsabilidades que los profesionales matriculados asumen a fin de garantizar un ejercicio profesional eficiente.
Además, protege los derechos y prerrogativas que los títulos profesionales otorgan, y que muchas veces, en la práctica, no son considerados o contemplados por quienes requieren sus servicios. Matricularse en un consejo profesional importa formar parte de una entidad que lo contiene y controla el ejercicio profesional mediante acciones concretas para combatir el ejercicio ilegal, defender las incumbencias y los legítimos intereses de la actividad.
A su vez, el matriculado puede obtener numerosos servicios y beneficios. Entre ellos, puede acceder a capacitación de alta calidad en diferentes modalidades (presenciales o virtuales) en las distintas áreas de incumbencia profesional, acceder a la biblioteca y al asesoramiento que brinda el Consejo en las distintas especialidades.
También podrá participar en diferentes actividades culturales, deportivas, de esparcimiento y acceder a créditos, contar con seguro de vida colectivo de sepelio y subsidio por fallecimiento.
Asimismo, le permite al matriculado poder integrar y participar de Comisiones Asesoras, incluso para aquellos que desempeñan sus actividades exclusivamente en relación de dependencia, los cuales tienen una problemática laboral y necesidad de capacitación propia.
Desde el punto de vista de la sociedad
Hoy, sobre las organizaciones tanto públicas como privadas recae, además de otras, la responsabilidad social de ser generadoras de empleo y de desarrollo de la economía. La sustentabilidad de éstas depende en muchas oportunidades de una eficiente administración.
Esto denota la gran importancia y la responsabilidad de contar con profesionales matriculados en las áreas administrativas o de gestión, que trasciende la propia organización.
Los profesionales en ciencias económicas que ejercen la profesión deben matricularse conforme lo dispuesto por el Art. 1º de la Ley Nacional Nº 20488. Si el ejercicio es “exclusivo en relación de dependencia” también deben hacerlo, como dispone el Art 57º de la Ley Provincial Nº 10051, y para ello el CPCE cuenta con una matrícula especial reglamentada por resolución del Consejo Directivo Nº 35/12.
La matriculación es el mecanismo reconocido para que sean los profesionales debidamente formados y habilitados quienes ocupen los espacios laborales que por derecho les corresponden y para que éstos desarrollen su actividad en un marco de responsabilidad y ética profesional.
No importa el tamaño de la organización o si se trata de negocios personales: el profesional es el recurso estratégico, el acompañamiento permanente y necesario a la gestión empresarial y el que aporta los elementos claves para tomar las mejores decisiones. Contar con un profesional de las Ciencias Económicas matriculado respaldará y brindará siempre un asesoramiento adecuado a su labor.