La decisión de saldar la totalidad de la deuda con el Club de París fue recibida con satisfacción por las autoridades del organismo multilateral y por los países desarrollados que integran la entidad; no obstante hubo algunas críticas.
Entre las voces a favor, el Departamento de Estado de EE UU fue el primero en manifestar su beneplácito, se sumaron Italia, España, Francia, Alemania y el propio titular del Club de París, Xavier Musca: “Consideramos que se está tomando una buena decisión, si todo es confirmado e implementado”, dijo. Señaló que el Club de París comenzó a trabajar sobre el tema luego del anuncio de la Presidenta.
El FMI se sumó a los elogios, el primer subdirector gerente del organismo, John Lipsky, expresó su deseo de que la medida sea “un paso positivo” en la relación bilateral.
Por su parte, el diario británico Financial Times sostuvo que la cancelación de la deuda “no hará nada para mejorar el acceso” a los mercados financieros internacionales. El influyente matutino británico señaló que ese pago tampoco “reducirá la dependencia forzada del Gobierno a Venezuela para el financiamiento”.
Por otra parte, tras el anuncio el titular de la cartera de Interior, Florencio Randazzo, descartó la posibilidad de una reapertura del canje de bonos para los tenedores que quedaron afuera.