De acuerdo con el estudio UPS Business Monitor, 60 por ciento de las pequeñas y medianas empresas participa actualmente en el comercio global o planea hacerlo en el futuro.
Para las pequeñas y medianas empresas (pymes) en América Latina, participar en el comercio global es esencial para su éxito. Tal como lo reveló la quinta edición del estudio UPS Business Monitor Latin America (BMLA), 80 por ciento de los ejecutivos entrevistados declaró que el comercio global fue beneficioso para su crecimiento económico. El estudio BMLA, auspiciado por UPS, en el cual se encuestó a más de 800 altos ejecutivos de pyme en siete países de la región, brinda una nueva perspectiva acerca de las más recientes opiniones, actitudes y hábitos de los ejecutivos en las pymes de toda la región.
Cuando se analizan los resultados de los estudios del BMLA realizados después de la crisis de 2008, las pymes identificaron las oportunidades de crecimiento que existen más allá de sus fronteras y están gradualmente aumentando su participación en el comercio global. De acuerdo con el estudio de 2011, sesenta por ciento de las pequeñas y medianas empresas actualmente participa en el comercio global o planea hacerlo en el futuro. Asimismo, ejecutivos en Brasil y Chile consideran que el comercio global es más beneficioso para las compañías que tienen entre 50 y 250 empleados.
“Con base en estos resultados, vemos que la participación general en el comercio global es un elemento de gran relevancia para muchas empresas en la región”, dijo Griselda Hernández, directora de Procesos para Clientes de UPS Región de las Américas. “El gobierno y los proveedores deben reunirse y optimizar procesos en la medida de lo posible para permitir a las pymes -una fuerza vital de la economía- continuar creciendo”, declaró Hernández.
Trabas para exportar
Las pymes enfrentan algunos obstáculos al tratar de expandir sus negocios a escala mundial. Noventa por ciento de los países encuestados identifica que la confianza en proveedores extranjeros fue el problema que más afectó a sus empresas durante los últimos cinco años, seguido por el aumento en tiempos de entrega y los retrasos en zonas fronterizas. Asimismo, se mencionaron los impuestos por importaciones y exportaciones como la principal barrera para la expansión mundial.
Entre los datos encontrados, 33 por ciento de los ejecutivos encuestados mencionó que cree que las exportaciones de sus compañías continuarán teniendo el mismo nivel; mientras que 30 por ciento cree que tendrán un leve declive. Sólo cinco por ciento considera que las actividades de exportación aumentarán ligeramente.
En comparación con la encuesta realizada en 2010, el estudio reveló que las pymes encuestadas sienten que actualmente tanto el crecimiento en América Latina como el comercio con otras regiones permanecieron estables con un aumento significativo en las importaciones.