La crisis derivada del paro agropecuario generó evidentes consecuencias no sólo en la comercialización de granos sino en la actividad industrial, comercial y de servicios en general.
En ese marco, la industria de Córdoba y, particularmente el sector más estrechamente ligado al campo, sufrió el cimbronazo y advirtió sobre los efectos en el tiempo de un conflicto que aún continúa sin resolverse.
La preocupación del sector no es ajena al secretario de Industria de la Provincia, César Martinelli. A horas del encuentro entre el Gobierno nacional y el campo y con casi dos meses de medidas de fuerza por detrás, el funcionario evaluó junto a Comercio y Justicia la actual coyuntura del sector manufacturero en la provincia y las perspectivas futuras, atadas a la evolución del conflicto y el agro.
“La industria de Córdoba es muy diversificada. Tiene innumerables sectores, fabricantes de maquinaria agrícola, la industria frigorífica y otras ramas de la industria alimentaria como pueden ser aquellos que requieren de la harina como insumo principal, que han tenido la mayor afectación en esta cuestión (del campo) y como consecuencia, ello ha impactado en sectores de actividad más pequeños como las panaderías. Indudablemente, en estos sectores que tienen relación directa con la producción agrícola, el grado de afectación ha sido en algunos casos de significativa importancia. Pero la Provincia tiene un amplio espectro de utilidades industriales y muchas de ellas no han sido directamente afectadas por el conflicto del campo.
– ¿Tienen algún parámetro de cuál fue el efecto concreto sobre determinados sectores?
– No se puede estimar ese efecto porque objetivamente no tengo parámetros. Lo que sí puedo decir es que están apareciendo muchas luces naranjas de alerta en las caídas de ventas en algunos sectores que estaban sobredemandados como el de maquinaria agrícola. Pero de resolverse el conflicto, rápidamente tenemos la esperanza de que las luces se reviertan y no sigan a estadios más comprometidos, donde vamos a tener una concreta caída de actividad en muchas plantas industriales, sobre todo en el interior de la provincia donde más ha afectado.
– Además del fondo destinado a subsidiar las suspensiones de personal, ¿el Gobierno ha activado otra herramienta para atender a los sectores más afectados?
– El Banco de Córdoba ha puesto a disposición los créditos que ya ha anunciado con tasas convenientes donde la Provincia financia algunos puntos.
– Pero esa herramienta ya estaba vigente con anterioridad. ¿En este caso hubo algún instrumento nuevo?
– Bueno, se ha activado la posibilidad de refinanciar los compromisos con el Banco de la Provincia de las empresas que han visto interrumpida la cadena de pagos.
– Ayer la presidenta Cristina Fernández anunció un proyecto de ley para incentivar la producción de autopartes nacionales. ¿En qué medida podría beneficiar a las autopartistas cordobesas?
– Justamente, este proyecto de ley que se envía al Congreso tiene que ver con consolidar hacia adelante el conjunto de incentivos a la producción de autopartes y tiene que ver con Córdoba porque es gran productora de vehículos y de autopartes, es decir, todo esto tiene que ver con el mismo concepto y son herramientas concurrentes que tienden a consolidar a la provincia en el sector metalmecánico y el mecánico autopartista en particula