ESCUCHARLa bodega argentina “Valle del Indio”, con una asistencia perfecta en todas las ediciones de la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés), se prepara para su séptima participación en Shanghai destacando las oportunidades que ofrece el evento para construir vínculos a largo plazo e impulsar el crecimiento de sus exportaciones, sostuvo el director de la bodega, Leonardo Bonomo.
Ubicada en la región de Luján de Cuyo en la provincia vitícola de Mendoza (oeste), Valle del Indio es una bodega boutique con capacidad de producción de vinos de media y alta gama enviados principalmente a China, su principal destino de exportación.
“Participamos desde el 2018, fue la primera presentación y desde ahí hemos estado en todas las ediciones y en algunas he podido viajar, en otras no, pero hemos estado en todas las ediciones, por eso entendemos que es una construcción a largo plazo y eso lo aprendimos de China, que las cosas son para siempre”, expresó Bonomo en una reciente entrevista ofrecida a la agencia de noticias Xinhua.
Desde su incursión en este mercado principalmente con la marca “Akila” y distintas cepas, la empresa ha logrado triplicar sus despachos a China y vaticina un futuro aún más prometedor.
“Son pequeños montos pero se van duplicando año tras año y eso tiene mucho que ver con la posibilidad de estar todos los años en la CIIE mostrando nuestros vinos, nuestros productos argentinos”, indicó Bonomo.
En esta séptima edición, la bodega presentará la marca “Alma Criolla”, un Malbec en cuyo proceso no se emplean barricas de madera, algo que marca un cambio respecto a sus vinos anteriores; en ese sentido, la apuesta es seguir innovando y explorando las preferencias del consumidor chino.
“Vamos a presentar un Alma Criolla ‘Malbec’ sin nada de madera. Siempre hemos llevado vinos con mucha madera; también tenemos algunos vinos orgánicos que probablemente los estaremos probando y degustando en la CIIE”, adelantó Bonomo.
Agregó que lo que distingue al vino argentino de otros a escala mundial “es la cepa Malbec, que tiene características únicas en la forma de crecer en Argentina, que tienen que ver con la fruta que la hace única; en ningún otro lugar del mundo tiene estas características”.
Las expectativas de la bodega son altas para esta nueva edición en Shanghai, donde esperan alcanzar un crecimiento significativo en ventas gracias al alcance que otorga la feria, la cual, aseguran, ha sido una herramienta crucial para aumentar el reconocimiento de la marca y expandir su red de contactos.
“Esperamos duplicar las ventas del último año; vamos a ver si lo logramos pero creo que podemos alcanzar esas expectativas por la visibilidad y la fuerza que tiene la CIIE, es la feria de importaciones más grande del mundo, a nosotros nos ayuda mucho y tenemos muy buena recepción por parte del mercado chino de nuestros productos”, comentó el director.
Asimismo, señaló que para una empresa pequeña como Valle del Indio, la magnitud y el apoyo que ofrece la CIIE no tiene comparación con otras ferias internacionales, en ese contexto destacó la importancia de las gestiones institucionales tanto del lado de China como de la parte argentina para garantizar la presencia en estos mercados.
“El otro elemento muy importante para nosotros es el apoyo institucional del Gobierno chino para poder estar presentes allá y de la misma forma en la Cancillería Argentina, a través de la Agencia Argentina de Inversión y Comercio Exterior (…) que permite que diferentes productores de menor escala y de gran escala podemos estar presente en la CIIE”, agregó.
Consultado sobre la eventual promoción de vinos orgánicos, Bonomo manifestó que las condiciones naturales de Argentina permiten producir vinos de alta calidad con procesos sustentables, por lo que este enfoque en la sostenibilidad es parte de la estrategia de la bodega para captar el interés de los consumidores chinos.
“Vamos a presentar algunos productos y los vinos argentinos tienen una gran virtud que al tener muy buena sanidad, altura sobre el nivel del mar y concentración con buen sol, es muy fácil elaborar productos orgánicos”, señaló.
Agregó que la marca que representa produce vinos “de forma austera, con mucha calidad pero siempre de forma austera”. “No compartimos las técnicas de gastar demasiada energía para la elaboración de las botellas o para el transporte”, ahondó.
Para Bonomo, la CIIE ha sido un espacio de aprendizaje para la bodega, que ha experimentado un crecimiento sostenido desde su primera participación y año tras año le ha permitido fortalecer sus relaciones comerciales y expandir su negocio en el mercado chino.
“El aprendizaje más importante que obtuve de la CIIE es el crecimiento. Uno empieza de pequeño y va creciendo poco a poco; año tras año se va logrando crecer y aumentar el volumen y las relaciones y los mercados”, concluyó.
