Tras la cancelación de 319 vuelos que afectó el libre tránsito de más de 37 mil personas por el paro en Aerolíneas Argentinas, el secretario de Transporte, Franco Mogetta, informó que el sindicalista Pablo Biró será excluido del directorio de empresa la semana que viene, en la próxima asamblea.
En pleno caos por la protesta motorizada por pilotos y aeronavegantes, la firma estatal calificó a la medida como “intempestiva, abusiva y fuera de contexto, promocionada por dirigentes gremiales de forma irresponsable”.
Por lo pronto, el Gobierno está preparando la implementación de la esencialidad, para garantizar la prestación de servicios mínimos en futuros conflictos y evitar que se repitan situaciones como las actuales, asegurando que el 50% de los vuelos continúe operando incluso durante una huelga. En caso de incumplimiento, se contemplan sanciones severas, despidos incluidos.
El miércoles, los sindicatos aeronáuticos definieron el paro. Advirtieron que “no se trata de una cuestión salarial” y apuntaron a la intención del Gobierno de privatizar la empresa.
La resolución se adoptó por aclamación en una asamblea realizada en la sede de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), a propuesta del titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Biró, quien en la reunión dijo que el Gobierno “no quiere dialogar” y que busca “romper la unidad”.
Los dichos del dirigente se dieron en el marco de las versiones sobre la división que existiría entre los gremios del sector sobre el tema salarial, ya que algunas organizaciones aceptaron firmar un acuerdo por debajo del 25% de aumento que reclaman la APLA y la AAA, que dirige el moyanista Juan Pablo Brey.
Finalizada la asamblea, Brey anunció que los trabajadores de ATE-ANAC (Administración Nacional de la Aviación Civil) también irán a la huelga el jueves 19 de este mes.
Mogetta ya había anunciado que se iniciarán acciones legales para expulsar a Biró. También ratificó que se avanzará en la demanda en contra del dirigente por las pérdidas económicas que los paros le generaron a la compañía.
“No estamos inventando nada que no esté establecido en la ley. Vamos a esperar la decisión de la Justicia con respecto a la recuperación de los daños, pero la expulsión de Biró es una decisión del Gobierno Nacional y ya está tomada”, sostuvo el funcionario. “Estamos dispuestos a llevar esto hasta las últimas consecuencias”, señaló.
En esa línea, precisó que se convocará una asamblea para expulsar con causa a Biró y que, luego, se avanzará con el frente judicial, para evitar, a futuro, conductas como las que tuvo el piloto.
“Velamos por el interés de los pasajeros”, sumó Mogetta. Indicó que “el trabajador común” de la empresa estatal entiende el contexto del país. Juzgó que es “mucho más colaborativo que Biró” y que el gremialista “solo defiende sus intereses personales”.
“Tenemos información de gente que fue forzada para no presentarse a sus puestos de trabajo en asambleas. Estas prácticas eran protegidas y bien vistas por los gobiernos anteriores. Nosotros le vamos a dar protección a los usuarios y a los trabajadores que quieran trabajar”, afirmó.
Insistió en que van a proteger a los trabajadores que quieran colaborar con la compañía, para que preste un servicio que es esencial para la Argentina, por lo extenso del territorio, y por la necesidad que tiene la gente del interior de, por ejemplo, acceder a la salud.
“Las negociaciones están abiertas con todos los gremios. Estamos proponiendo una recomposición razonable para lo que están negociando en el sector público. No pueden pretender recuperar la inflación que le regalaron al Gobierno anterior. La postura de esta gente, lo expresó el mismo Biró en su momento, es que era una obligación moral defender a Alberto Fernández. Deben aceptar que su posicionamiento es político, y no se deben esconder en los fueros gremiales y la lucha de los trabajadores”, enfatizó. “Llevaremos adelante todos los medios posibles para garantizar el servicio. No le vamos a permitir a estos tipos que sigan jugando con los derechos, las necesidades y la vida de los argentinos”, cerró.
Ahora, el secretario de Transporte ratificó que la Administración de Javier Milei les reclamará a Biró -alineado al kircherismo- y a la APLA los daños y las pérdidas que generaron. Una vez más, acusó a pilotos y tripulantes de cabina de estar “desconectados de la realidad económica del país” y consideró que sus demandas “no están alineadas con la situación salarial del sector público”.
Asimismo, destacó las contradicciones del discurso sindical. “Dicen que defienden a la empresa, pero lo disimulan bastante bien con este tipo de medidas que le hacen perder millones”, disparó