El pasado 2 de junio, la Red Argentina de Reservas Naturales Privadas (RARNP), la primera iniciativa en el país que integra reservas privadas y organizaciones de la sociedad civil comprometidas con la conservación de los valores naturales y culturales en tierras de propiedad privada, celebró sus diez años desde su creación.
Este movimiento voluntario de conservación en tierras privadas contribuye a la conservación efectiva y uso sustentable de los valores naturales y culturales del territorio nacional, convirtiéndose en la primera iniciativa en el país que integra y articula el compromiso de los propietarios de reservas privadas y organizaciones ambientalistas de renombre como Fundación Vida Silvestre Argentina, Félix de Azara, Aves Argentinas, entre otras.
“Cada vez son más los propietarios que, implicados y preocupados por el futuro de sus hijos en este planeta, están convencidos y motivados por conservar. Estas iniciativas que buscan producir conservando son el gran desafío mundial para lograr un equilibrio entre nuestra relación con la naturaleza y la racionalidad en el uso de los recursos. Producción sustentable, diversificada y económicamente rentable donde la naturaleza es protagonista central”, explican desde la entidad.
“La conservación voluntaria en Argentina es un pilar fundamental para preservar la riqueza de nuestros ecosistemas y asegurar un futuro sostenible para las generaciones futuras. El compromiso de quienes integramos la Red de Reservas en la protección del medio ambiente refleja la importancia de valorar y cuidar la biodiversidad lo que hace único a nuestro país al tener la mayor cantidad de hectáreas bajo conservación privada. A través de la conservación voluntaria, estamos construyendo un legado de respeto y responsabilidad hacia la naturaleza, vital para mantener el equilibrio de nuestros ecosistemas”, expresó Guillermo Connell, Presidente de Red Argentina de Reservas Naturales Privadas y propietario de RNP Yaguarundí en San Vicente – Misiones.
En la Argentina las áreas protegidas cubren tan solo el 8% del territorio nacional, es por ello que es clave sumar a propietarios privados, que son dueños del 90% del territorio y cuentan con unos recursos naturales y culturales de lo más valiosos y diversos.
La Red Argentina de Reservas Privadas está conformada por 111 reservas privadas que son campos de personas físicas, empresas, organizaciones sin fines de lucro, clubes y hasta universidades que tienen distintas motivaciones pero confluyen en objetivos de conservación y uso sustentable y que suman 223 mil hectáreas hasta el día de hoy. Esto convierte a Argentina en uno de los países de Latinoamérica con más superficie protegida por iniciativas de esta categoría.
“Formar parte de la RARNAP es la mejor manera de sentirse acompañados, de aunar esfuerzos, de sentir que vamos por el camino correcto”, comenta Juliana Powell, copropietaria de RNP Senderos del Monte en Gualeguaychú, Entre Ríos, integrante de la comisión de turismo de la RARNAP.
“Es muy gratificante ser testigo del crecimiento de la RARNAP en estos de 10 años de trayectoria, en los que se han consolidado equipos de trabajo a nivel regional, como así también por intereses (Ecoturismo, producciones sustentables de baja escala y ganadería regenerativa, servicios ambientales)”, agregó Powell.
“En un mundo marcado por la significativa pérdida de biodiversidad global, el crecimiento poblacional, la pobreza y la demanda voraz de recursos naturales, las reservas naturales privadas cobran cada vez más importancia a nivel mundial como protagonistas en la creación de áreas protegidas de usos múltiples donde se puede conservar pero también producir de forma sustentable como por ejemplo la producción de carne sobre pastizales nativos o bien el desarrollo del ecoturismo en las reservas son actividades económicas rentables y compatibles con la conservación de la biodiversidad”, sostienen desde la institución.
Desde la Red esperan que “el estado reconozca la importancia de la complementariedad de la conservación de tierras públicas con las tierras privadas y pueda así facilitar y fomentar su formación, ya que permiten aumentar la superficie protegida de un país con menor costo para los gobiernos.
“La dedicación a la conservación voluntaria en Argentina es un acto de amor y respeto por nuestro planeta, demostrando que juntos podemos proteger y revitalizar la belleza natural de nuestro maravilloso país. Por eso desde hace 10 años desde la RARNAP se ha asumido el compromiso de conservar el medio ambiente e invitan a visitar y conocer las reservas privadas de la red y de esta manera ayudar a impulsar y promover sus productos y servicios, donde se protege la biodiversidad, los recursos hídricos, el suelo y se contribuye a la reducción de emisión de gases de efecto invernadero”, concluyeron desde la organización.