En la tarde de este martes se confirmó la renuncia de Diego Guerendiain (foto junto al ministro), jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia, amigo personal y mano derecha de Mariano Cúneo Libarona. Lo hizo por carta invocando “circunstancias personales”.
La noticia se había formalizado el viernes pasado con la presentación formal de la renuncia, dirigida al ministro, que esta semana está de viaje donde en Viena, Austria, participó este lunes de la 33ª sesión de la Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal de las Naciones Unidas (CCPCJ).
Fuentes de esa cartera señalaron que antes de embarcarse hacia el referido destino, Cúneo Libarona le aceptó la dimisión.
En el documento en el que anunció su salida, el funcionario fue elogioso con su jefe y destacó sus “30 años de amistad”. El texto completo:
“Por la presente, me dirijo a usted para presentar formalmente mi renuncia al cargo de Jefe de Gabinete del Ministerio de Justicia, con efecto a partir del 13 de mayo del corriente, debido a circunstancias personales”, encabezó su texto de renuncia Guerendiain y agregó: “Ha sido un honor servir en este cargo y contribuir a su lado en la gestión del Ministerio de Justicia durante este tiempo de intensa e incansable actividad.
Luego destacó elogios al ministro de Javier Milei y repasó su paso por el cargo, en rigor, titular de la Unidad Gabinete de Asesores. “No fue solo la amistad de más de 30 años que nos une, y que sin duda continuará, lo que me llevó a aceptar la propuesta para que lo acompañe desde un lugar tan cercano, sino la firme convicción en los objetivos, la transparencia y la responsabilidad con la que entendemos que debe encararse la función pública en esta área que tanta pasión nos genera. Aprecio profundamente la oportunidad de trabajar con un equipo tan talentoso y dedicado, así como la confianza que se me otorgó para desempeñar tan alta función en el Ministerio”.
“Quiero expresarle a Ud mi enorme gratitud al igual que a todo el equipo por el apoyo y la colaboración en la gestión realizada. Quedo a disposición para colaborar en cualquier aspecto relacionado con la noble y honorable tarea que se ha propuesto y así contribuir al cumplimiento de sus objetivos”, continuó.
Y saludó formalmente “con el aprecio de siempre”.