Hace horas, el ministro de Exteriores israelí anunció que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, no será bienvenido en su país hasta que se retracte de los comentarios en los que comparó la guerra contra Hamas en Gaza con el genocidio nazi durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Israel Katz dijo: “No olvidaremos ni perdonaremos. Es un grave ataque antisemita. En mi nombre y en el nombre de los ciudadanos de Israel, dígale al presidente Lula que es ‘persona non grata’ en Israel”. En esa línea, sumó que la medida regirá hasta que el brasileño rectifique sus aseveraciones.
Katz, hijo de sobrevivientes del Holocausto, llevó al embajador de Brasil, Frederico Meyer, al monumento conmemorativo del Holocausto en Jerusalén, el museo Yad Vashem. Frente a la prensa, le dijo: “Lo traje a un lugar que testifica mejor que cualquier otra cosa lo que los nazis y Adolf)Hitler hicieron a los judíos, incluidos los miembros de mi familia”.
Lula acusó a Israel de cometer un “genocidio” de civiles palestinos en la Franja de Gaza y comparó sus acciones con la campaña de Hitler para exterminar a los judíos. “Lo que está sucediendo en la Franja de Gaza y con el pueblo palestino no existe en ningún otro momento histórico. En realidad, ha ocurrido: cuando Hitler decidió matar a los judíos”, propaló el mandatario en la cumbre de la Unión Africana en la capital etíope, Adis Abeba.
“No es una guerra de soldados contra soldados. Es una guerra entre un Ejército altamente preparado y mujeres y niños”, añadió.
La opiniones del sudamericano generaron una dura respuesta del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que lo acusó de trivializar el Holocausto y anticipó la convocatoria al embajador Meyer.
Katz enfatizó ante Meyer que “la comparación entre la guerra justa de Israel contra Hamas y las atrocidades de Hitler y los nazis es una vergüenza”.
Juicio político
La declaración del líder brasileño también repercutió en su país: el bolsonarismo anunció que impulsará un juicio político en su contra e incorporó el tema en la convocatoria a la marcha de defensa del expresidente Jair Bolsonaro que convocó para el domingo próximo.
Luego de que se ventilaran las graves repercusiones por su discurso, Lula llamó a consultas sin plazo para retorno a su embajador en Tel Aviv.