Más de 40 jefes comunales de todo el país, entre ellos Daniel Passerini de Córdoba, reclamaron a la Nación que revierta la eliminación de los aportes al interior. Como alternativa, plantearon coparticipar el impuesto a los Combustibles. El cordobés anticipó una inminente suba del boleto y no descartó revisiones mensuales. El Presidente insistió en que son las provincias las que tienen que sostener el servicio
Más de 40 intendentes de todo el país plantearon ayer al Gobierno nacional que restituya los subsidios al transporte del interior, eliminados días atrás por el propio Ejecutivo, al tiempo que propusieron como alternativa coparticipar parte del impuesto a los Combustibles, como fuente de financiamiento para sostener esos aportes.
De no lograr una respuesta favorable, anticiparon que iniciarán acciones administrativas y también judiciales.
En tanto, el presidente Javier Milei clausuró cualquier chance de sostener el envío de fondos a las provincias para solventar parte de los costos del servicio.
En ese marco, indicó que las provincias tendrán que recortar o redireccionar partidas si quieren continuar subsidiando al transporte, tras el retiro de recursos por parte del Gobierno del Fondo Compensador.
“En lugar de estar contratando artistas para hacer publicidad política y atacar espacios de distintas ideas, que se dediquen a hacer política seria”, sostuvo el jefe de Estado en declaraciones a Radio La Red.
El mandatario citó como ejemplo a Córdoba, cuyo gobernador, Martín Llaryora, “se quejaba de que caía en $20.000 millones el subsidio de transporte y que, por culpa mía, tenía que subir los precios”, dijo.
Milei afirmó que eso “es mentira”, sugirió que Llaryora “podría bajar el gasto”, y apuntó: “Él gasta $26 mil millones en pauta oficial para que los periodistas hablen bien de él; que deje de usar la pauta oficial como mecanismo de autobombo y les transfiera esa plata a los cordobeses”, le espetó.
La polémica con Llaryora tomó cuerpo en las últimas horas luego de que el mandatario cordobés se puso al frente de los reclamos por la quita de subsidios.
En ese marco, Milei lo eligió como blanco predilecto para referirse a la “casta” y los “traidores” que rechazaron parte de la ley ómnibus y que ahora pretenden mantener “privilegios” a costa de fondos que deberían aportar desde sus propios distritos.
Como fuere, la decisión del Gobierno nacional de eliminar los subsidios al transporte del interior obligará a los diferentes distritos a subir las tarifas del servicio urbano.
En el caso de la ciudad de Córdoba, tal como anticipó en las últimas horas Comercio y Justicia, el precio del boleto se ubicará entre 700 y 800 pesos.
La decisión será tomada hoy en conjunto con distritos pares como Santa Fe y Rosario, según anticipó anoche el intendente Passerini.
“El valor lo vamos a consensuar hoy en función de la realidad que nos afecta por la caída de los subsidios”, dijo. En paralelo, no descartó que, una vez actualizado el valor, haya una revisión periódica en línea con el aumento de costos.
Por lo pronto, el municipio continuará realizando aportes que se ubicarían en torno a 4 mil millones de pesos mensuales, entre otros objetivos para atender el aumento paritario reclamado por la UTA.
Reclamo conjunto
En cuanto al planteo de los intendentes, fue informado al mediodía de ayer tras un encuentro en un hotel en cercanías del Congreso nacional.
En ese contexto, aseguraron que impulsarán un reclamo judicial por el incumplimiento del pacto fiscal aprobado por ley, al tiempo que propusieron cambiar la coparticipación del impuesto a los Combustibles, de acuerdo al análisis y la conclusión a la que arribaron.
De la reunión participaron los intendentes Maximiliano Frontera (Villa Mercedes, San Luis), Damián Bernarte (San Francisco), Rosario Romero (Paraná), Juan Manuel Llamosas ( Rio Cuarto), Juan Pablo Poletti (Santa Fe), María Pasqualini (Neuquén), Rodrigo Buteler (Cipolletti, Río Negro) y Marcos Castro (Viedma, Río Negro).
También asistieron Othar Macharashvili (Comodoro Rivadavia, Chubut), Walter Cortés, (Bariloche), Raúl Jorge (San Salvador de Jujuy), Norma Fuentes (Santiago del Estero), Jorge Jofré, (Formosa), Leonardo Viotti, (Rafaela, Santa Fe), Pablo Javkin (Rosario) y Daniel Passerini (Córdoba).
“Todos pagamos un impuesto para que el Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA) tenga el boleto más barato. Nosotros no estamos generando un gasto, el Estado nacional recauda un tributo y se lo quedan allá”, dijo Javkin.
Por su parte, Passerini reclamó como alternativa que el Gobierno distribuya una parte del impuesto a los Combustibles para evitar el colapso del sistema y un aumento de tarifas que, por sus valores, los usuarios no podrán pagar.
Javkin, en tanto, expresó: “Los ciudadanos de nuestras ciudades que son usuarios del sistema de transporte no tienen por qué pagar cinco veces lo que se paga en otro lugar del país” y agregó: “Esto no es una discusión que nosotros estamos dando por obras o por presupuesto, que obviamente también la vamos a dar, esto es en defensa de la gente que todas las mañanas en nuestras ciudades se toma el colectivo”.
Asimismo, Javkin dijo que los intendentes llevarán el reclamo “por todas las vías, por el administrativo, político, legal y legislativo, porque en definitiva acá lo que estamos discutiendo es un impuesto que hoy pagan todos los argentinos, cómo se reparte, y sobre todo una decisión política, que es apartar al Interior del reparto de ese impuesto”.
Passerini señaló asimismo: “El Gobierno nacional con esta decisión quiere empujarnos a que castiguemos al usuario con una tarifa, parecería que para el Presidente, la casta son los jubilados, los estudiantes, los trabajadores, los esenciales que tanto defendimos en la pandemia y hoy están castigados por el peso de un ajuste que no tiene sentido”.
“El subsidio es un derecho sino por qué en el AMBA siguen los subsidios y al interior nos siguen castigando, nos discriminaron durante muchos años todos los gobiernos nacionales porque el 85% se quedaba acá y lo que sobraba nos lo tiraban a nosotros; hoy ni las sobras nos están dando”, cuestionó.
También los choferes
Ayer, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) alertó sobre que -debido a la eliminación de los subsidios al transporte que otorgaba el Estado Nacional- este servicio “colapsará, inevitable e irremediablemente” y aseguró que también “peligran el salario, las fuentes de trabajo y el sistema de transporte de pasajeros”.
La eliminación del Fondo Compensador del Interior que financiaba los subsidios del transporte en casi todo el país, anunciada por la Secretaría de Transporte, “tiene la clara intención de cambiar el sistema de transporte público de pasajeros”, consideró el gremio.
Milei, inmutable
Los reclamos de gobernadores e intendentes no parecen que fueran a tener eco en el Gobierno. Al menos así lo dejó en claro el presidente Milei.
Para el jefe de Estado, las provincias tendrán que recortar o redireccionar partidas si quieren continuar subsidiando al transporte, tras el retiro de recursos por parte del Gobierno del Fondo Compensador, en tanto en el sector empresarial alertaron sobre que “no hay fondos para pagar la paritaria” de marzo y no descartaron una eventual medida de fuerza.
Milei, en respuesta a las críticas, afirmó que si quieren continuar subsidiando el transporte deberán recortar o redireccionar partidas.
“En lugar de estar contratando artistas para hacer publicidad política y atacar espacios de distintas ideas, que se dediquen a hacer política seria”, sostuvo el jefe de Estado.
Este mismo jueves, el secretario de Transporte cordobés, Marcelo Rodio, advirtió que el boleto sin subsidios nacionales “en las principales ciudades del interior, como Córdoba capital y Rosario, podría ser de entre $1.000 y $1.200”.
“Esto pasa porque en el AMBA se sigue subsidiando el transporte público, con lo cual la ley tendría que ser pareja para todos los sectores”, reclamó el funcionario cordobés, y graficó que “entre diciembre, enero y febrero, al AMBA le mandaron más de $300.000 millones cuando al interior provincial, sólo $8.000 millones.