“Las pymes necesitan trabajar”. Bajo esa premisa, en un comunicado, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) se pronunció en contra del paro de la CGT, al entender que implicará un día sin producción y sin actividad comercial que le causará una pérdida económica “mayúscula” al país.
“Las pequeñas y medianas empresas representan el entramado más auténtico de la economía real de la Argentina. Por eso, desde CAME siempre se pide más actividad, más producción y más ventas”, sumó la organización.
Por su parte, el titular de la confederación, Alfredo González, recordó que cada mes las firmas deben afrontar gastos fijos y que las pymes son las principales generadoras de empleo registrado.
El paro se dará en el marco de caídas en el consumo y la industria pyme. De acuerdo a los datos de la CAME, en diciembre las ventas minoristas tuvieron una baja anual de 13,7%, en la medición a precios constantes, y finalizaron el año pasado con una retracción de 3,4%.
Por su parte, la producción mermó 26,9% en diciembre y en 2023 terminó con un declive de 2,6%.
“Somos respetuosos de las decisiones del sindicalismo y del derecho a huelga. Entendemos y compartimos la incertidumbre imperante y la angustia que afecta a buena parte de nuestra población, pero no creemos que un paro sea el instrumento que vaya a revertir esta situación”, resaltó González.
CAC
Por su parte, la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) hizo un “llamado a reflexionar” sobre los dispares criterios con los que algunos sectores de la política y del sindicalismo protestan.
Con un duro comunicado, la entidad advirtió sobre la diferencia de criterio de los sectores que adhieren a la medida de fuerza pero “no realizaron manifestación alguna durante los cuatro años en que Alberto Fernández ejerció el Poder Ejecutivo, período en que el crecimiento de la pobreza y la inflación, con su consecuente deterioro del poder adquisitivo, fueron constantes”.
“El paro anunciado para el próximo 24 de enero será el más rápido realizado a un gobierno nacional desde el retorno de la democracia, en 1983, a tan solo 40 días de haber asumido Milei la presidencia”, indicó.
Planteó además que se hace “a sabiendas de que el 56% de los ciudadanos acompañó en las urnas” las propuestas del economista “aunque no auguraban meses de bonanzas” sino de “un costoso pero necesario reacomodamiento macroeconómico”.
“En cualquier análisis que hagamos sobre el nuevo gobierno, no podemos obviar que la presente inflación es producto de medidas, equivocadas a nuestro juicio, tomadas por la gestión anterior”, amplió.
Sumó que aquéllas llevaron a que la presidencia de Fernández finalice con una inflación acumulada de 930,7%. “A modo de referencia, el gobierno de Mauricio Macri registró una variación de precios de 304,3%, una de las razones que motivó que la CGT realizara cinco paros generales. Resulta llamativo que durante la era Fernández no se llevara a cabo ninguno”, sumó.
“Nuestra responsabilidad, como dirigentes, es trabajar para el bien de todo el pueblo argentino, dejando de lado intereses personales, ideológicos, sectoriales y/o partidarios”, cerró la CAC.
Córdoba
La Cámara de Comercio de Córdoba también manifestó que no adherirá a la medida de fuerza.
“El comercio viene atravesando meses muy complicados de ventas, con una caída permanente y con una pérdida de rentabilidad marcada. No nos podemos dar el lujo de parar un día la actividad, y mucho menos poner trabas al intento de superación por parte del Gobierno Nacional a un contexto económico-social por de más difícil¨, manifestó José Viale, presidente de la entidad.
La cámara apuntó a que hay que pagar salarios a fin de mes, además de alquileres y servicios y otros ítems, y abogó aboga por resolver las diferencias a través de diálogos constructivos.
Al inicio de la semana, el presidente atribuyó el paro general a la coexistencia de “dos Argentinas” y criticó a los dirigente que “defienden sus intereses corporativos y sus tongos” en el debate por la ley “Bases”.
No obstante, en declaraciones a radio Rock and Pop, el jefe de Estado señaló que algunos sindicalistas de la central obrera “entienden la naturaleza del problema” de la economía, en referencia a que “no se crea empleo en el sector privado desde 2011”.
Afirmó además que el Gobierno “no cedió en nada” en la discusión legislativa y que los cambios que serán incorporados al proyecto son mejoras porque el debate que impulsa el oficialismo es “siempre con el equilibrio fiscal en la mesa”.
También consideró que replicar en enero un índice de inflación del 25%, como se registró en diciembre, sería un buen dato.
A la vez, reiteró que una vez que su Gobierno “estabilice la economía, limpie el sobrante monetario y sanee el Banco Central” va a “liberar el mercado de cambios plenamente”.
Bases
Por lo pronto, luego de que Luis Caputo convocara a entidades empresariales para discutir el DNU 70/23 y la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, las recibirá el jueves.
El ministro de Economía encabezará una reunión con las principales cámaras del campo, la industria y los servicios.
Participarán autoridades de la CAME, de la CAC, de la Asociación de Teleradiodifusoras Argentinas (ATA), de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro), de la Sociedad Rural Argentina (SRA), de la Unión Industrial Argentina (UIA), de la Cámara de la Industria Argentina del Software (CESSI), de la Federación Agraria Argentina (FAA), de la Confederación Rural Argentina (CRA), de la Asociación de Radiodifusoras Privadas Argentinas (ARPA) yde la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA).
Apyme
La Comisión Directiva Nacional de la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios (Apyme) ratificó su participación en la huelga.
Según la entidad, las medidas que impulsa la Administración de Milei “significan un certificado de defunción para la industria local, el mercado interno y las economías regionales”.
“Apyme no comparte las posturas empresariales cortoplacistas y desmemoriadas que avalan la quita de derechos laborales, sociales y productivos”, manifestó, distanciándose del criterio de la CAME.
“Es un error histórico que en distintos períodos del país llevó a la desaparición de decenas de miles de pymes, junto a sus trabajadores, destruyendo el tejido social y económico del que son parte”, opinó.
Apyme llamó a “la cordura y responsabilidad necesarias para no negociar el futuro del país y frenar íntegramente estas iniciativas”.
“No existen enmiendas ni atenuantes que valgan ante la entrega del poder público al presidente y la pérdida de la soberanía nacional”, opinó.
Reforma laboral
Cabe recordar que la semana pasada, la CAC reiteró su apoyo a la reforma laboral que contiene el DNU 70/23.
Destacó que existe desde 1924, en una actividad que comprende a cerca de 4.5 millones de trabajadores, lo que la coloca “en un lugar esencial” para poder informar y enriquecer el debate que podría hacerse en la Corte respecto de los alcances del Capítulo Laboral, Título IV del DNU.
Así, se ofreció para participar como “amicus curiae” (amigo del tribunal) ante el rechazo del DNU planteado por la CGT y CTA, que presentaron amparos.
La CAC argumentó que puede aportar los “fundamentos fácticos, jurídicos y técnicos” que recabó en un siglo de actividad en el sector empresario. “Los cambios que se impulsan en materia laboral propiciarán la creación de más puestos de trabajo, en empresas ya existentes y nuevas a conformarse”, aseveró.