En Francia, el presidente Emmanuel Macron anunció un “gran plan” para luchar contra la infertilidad y lograr un “rearme demográfico” en el país, que el año pasado registró el número de nacimientos más bajo desde 1946.
En la segunda economía de la Unión Europea (UE) detrás de Alemania nacieron 678 mil bebés en 2023 y la tasa de fecundidad de 1,68 niños por mujer va en retroceso.
Entre las medidas que comunicó el jefe de Estado para revertir la situación figura un nuevo permiso de paternidad y maternidad de seis meses para ambos progenitores en reemplazo del actual, al que definió como “extremadamente corto y mal pagado”.
“Francia también será más fuerte si aumenta su tasa de natalidad. Hasta hace poco, éramos un país en que ésta era su fuerza cuando nos comparábamos con nuestros vecinos”, sumó.
En el caso de la infertilidad, que a la fecha afecta a unos 3,3 millones de franceses, el mandatario adelantó que también se tomarán decisiones para paliarla.
Además, abogó por regular el uso de las pantallas (celulares, dispositivos móviles, entre otros) tanto en los hogares como en las escuelas.
Macron hizo los anuncios al presentar su visión para una “Francia más fuerte y más justa” y pidió trabajar por un “rearme cívico y de orden”, que pasará también por la experimentación del uso del uniforme escolar este año y su posible generalización en 2026.
Francia tiene 67.656.682 personas, por debajo de los 83.2 millones de Alemania y apenas por arriba Reino Unido (67.33 millones).
Al igual que varios países europeos, su población va en descenso, algo que golpea a la economía al tener menos personas en una etapa activa.