El ex secretario de Estado de Estados Unidos, Henry Kissinger (Heinz Alfred Kissinger) murió en su casa, en Connecticut, a los 100 años.
Educado en Harvard (Ciencias Políticas), durante más de medio siglo Kissinger fue el conductor de la política exterior norteamericana en la guerra fría.
Después de dejar la función pública, fue hombre de consulta de varios de los presidentes que siguieron a Richard Nixon; entre ello, los Bush.
Nació en Fürth, Baviera, Alemania, el 27 de mayo de 1923, en una familia de judíos alemanes. Llegó al mundo mientras su país afrontaba las consecuencias de la derrota en la Primera Guerra Mundial, en plena descomposición de la experiencia socialista de la República de Weimar.
Por la persecución de los nazis, los Kissinger se fueron a Nueva York cuando Heinz tenía 15 años.
Estudió en el City College y luego ingresó a Harvard. En 1943, a sus 20, fue reclutado por el Ejército. Su fluido alemán le abrió caminos. Además de convertirlo en ciudadano, fue ascendido a sargento e ingresó a los servicios de inteligencia militar.
En 1952 se graduó con la tesis “Paz, Legitimidad y Equilibrio” y siguió en la alta casa de estudios como docente.
Fue consultor de varias empresas; entre ellas, la gigantesca corporación industrial Rand, proveedora del Ejército.
En 1955 inició su carrera política en el Consejo Nacional de Seguridad. Llegó a la Casa Blan en 1961, durante la presidencia de John Kennedy.
Fue partidario y asesor de Nelson Rockefeller, como gobernador de Nueva York y como precandidato a presidente por el Partido Republicano (en 1960, 1964 y 1968).
Nixon lo designó Consejero de Seguridad Nacional, en 1969.
Con Kissinger, la política exterior de Estados Unidos pasó a ser más dura.
En 1973, Kissinger y su par vietnamita Le Duc Tho ganaron el Nobel de la Paz. El fuego cesó en 1975, con la entrada del Vietcong en Saigón, la entonces capital de Vietnam del Sur, actualmente Ho Chi Minh. Le Duc Tho, devolvió el galardón.
Kissinger abrió la puerta de las relaciones diplomáticas y comerciales con China y negoció con éxito tratados de control de armas nucleares con la ex Unión Soviética.