El tablero electoral del año que se avecina permitirá medir la incorporación real de las problemáticas económicas detectadas en la provincia a las plataformas de los distintos partidos políticos. Será tiempo de medir la conciencia de la clase dirigente.
Durante 2010, el Consejo para la Planificación Estratégica de la Provincia de Córdoba (Copec) consultó a entidades empresariales, institutos de investigación económica, universidades, organizaciones gremiales y colegios profesionales, entre otros actores productivos, con el propósito de confluir en una ”Agenda para el Desarrollo Económico con Equidad”. El resultado, divulgado ayer en el marco del cierre de año de la entidad, concluye en cuatro restricciones y cuatro oportunidades que, en materia económica, debería abordar la Provincia.
Manuel San Pedro, vicepresidente de Copec, señaló a Comercio y Justicia los alcances de lo logrado durante el año y apuntó los desafíos para 2011, que consistirán en la elaboración de investigaciones y estudios técnicos que permitan profundizar y actualizar los fundamentos de cada uno de los ocho componentes de la agenda y su presentación ante las principales fuerzas políticas a los efectos de ofrecerla como un insumo para la elaboración de planes de gobierno y plataformas electorales ante un año signado por las elecciones.
– ¿Cuáles son las restricciones detectadas?
-Hay cuatro restricciones para el desarrollo de la Provincia y cuatro oportunidades. Uno de los cuellos de botella tiene que ver con las brechas de desarrollos iniciales. Se trata de un inventario de lo que sería el déficit de infraestructura social.
La segunda restricción tiene que ver con el problema del financiamiento del desarrollo. Allí se va a trabajar en un estudio que oriente hacia la constitución de un fondo presupuestario, identificando experiencias internacionales al respecto, que implique asignar prioridades de financiamiento a una serie de iniciativas que influyan en la senda del desarrollo económico con equidad.
La tercera tiene que ver con la problemática de la energía para el desarrollo, que implica puntos como la diversificación de la matriz energética, en tanto que la cuarta restricción es la problemática de la crisis hídrica provincial. Ahí hay una serie de necesidades de estudios técnicos que hacen una proyección de la problemática en los próximos años a los fines de ser tenida en cuenta porque puede ser un cuello de botella importante para el desarrollo.
– ¿Cuáles son las oportunidades que descubrieron?
– Una de las oportunidades es la necesidad de la transformación de la proteína vegetal y animal, es decir, una reconversión del sector agroalimentario de Córdoba que implique agregar valor en la cadena agroalimentaria. Sobre este tema también se encargará un estudio técnico para ver qué es lo que nos conviene.
Otra tiene que ver con la exportación de servicios y de conocimientos. Desde telemedicina hasta proyectos profesionales sobre cálculos estructurales, diseño gráfico, diseño publicitario o producción audiovisual, prácticamente no hay profesión de Córdoba que no pueda ser montada en una plataforma tecnológica y pueda ser exportable. Eso -teniendo en cuenta que Córdoba debe tener una de las tasas más altas de profesionales por habitante- es una oportunidad significativa.
La tercera es la reconversión de los sectores tradicionales de la economía. Pasar del autopartismo a incorporar aeropartismo. Además, trabajar sobre una reconversión del perfil turístico tradicional, con proyección internacional, con algunos nichos a explotar. Otro punto es la diversificación del sector de la construcción a partir del desarrollo de oferta habitacional para el segmento de clase media con déficit de vivienda.
La cuarta, la articulación del sector científico técnico con el sector productivo, tratando de promover vinculación e innovación tecnológica en las que participen universidades y empresas en una fuerte promoción en estudiar energías renovables, tecnologías de la información y comunicación (Tics), etc.
– ¿Qué van a hacer con esta agenda en un año electoral como 2011?
– A partir del año que viene comenzamos a entregar esta documentación a los partidos políticos para que, sobre los componentes mencionados, ellos incorporen en sus plataformas electorales el modo en que piensan llevarlos a la práctica. Esto va a ser un insumo que receptarán los partidos y se les va a pedir que de algún modo lo contengan en sus plataformas y en sus programas de gobierno a futuro, mediante algún mecanismo de cómo materializarlos.