Medidas sus ventas a valores constantes, en los comercios minoristas pymes se registró un descenso de 3,5% en septiembre 2022, frente al mismo mes del año pasado, según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Cabe señalar que, por tercer mes consecutivo, se observa una baja en esas ventas en la comparación interanual. “Sin embargo, en los primeros nueve meses del año se observa un crecimiento en el comercio minorista del orden del 0,5% versus igual periodo 2021”, señala CAME.
En septiembre, cinco de los seis rubros relevados vieron reducir sus ventas en la confrontación con 2021. En el balance mensual, las colocaciones de las pequeñas y medianas empresas se retrajeron 1,4%, también con cinco rubros en declive y uno en alza.
La información surge del Índice de Ventas Minoristas Pymes de la CAME, elaborado con base en su relevamiento mensual hecho entre 1.207 comercios del país, entre los días 3 y 5 pasados.
Sólo dos rubros crecieron en ventas
El sector Farmacia y perfumería tuvo una suba de 8,1% interanual en sus ventas, y así se convirtió en el único que registró un incremento en el mencionado mes. El resto de los ramos se retrajo, con la mayor caída contabilizada por Textil e indumentaria (-17%).
En cambio, si se considera el rubro Alimentos y bebidas, las ventas disminuyeron 1% anual y 3,6% mensual, a valores constantes. Los negocios consultados coincidieron en que el mes estuvo marcado por una inflación creciente y una merma en la demanda respecto a meses anteriores. Los comerciantes manifestaron dificultades:reponer mercaderías, subas de precios semanales y acumulación de deudas con proveedores fueron las principales problemáticas del mes.
Cabe señalar que refirieron como factores que influyeron en la merma de las ventas la inflación y las permanentes movilizaciones de trabajadores en los principales puntos de los centros urbanos.
En lo referido a Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles, el desplome fue de 5,1% anual en septiembre y 3% en la comparación mensual, a valores constantes. “Fue otro mes en baja para las pymes del rubro, que ubicaron al incremento del costo financiero del último mes, al faltante de productos y, sobre todo, los aumentos de precios en cada entrega de mercadería, como la justificación de este comportamiento de las ventas”, advirtió CAME.
Calzado y marroquinería. Las ventas de este sector se retrajeron 10,5% anual y 5,7% mensual en septiembre, siempre medidas a valores constantes. Es importante mencionar que la mayoría de los comercios consultados llevó adelante acciones para aumentar la venta: reformas en los locales, incorporación de nuevos segmentos de productos, liquidaciones anticipadas. Estas estrategias de marketing intentaron incentivar el interés del público, desmotivado por la evolución de los precios.
Farmacia y perfumería. En este rubro hubo un aumento de 8,1% anual y 5,1% mensual. Además, es el único que contabiliza registros positivos desde hace cuatro meses en forma consecutiva. “Algunas farmacias informaron retrasos de pagos de las obras sociales, situación que no caracteriza la evolución de este mes en particular, dado que tiene un tiempo sin resolverse aún”, mencionaron en CAME.
En el rubro Ferretería, materiales eléctricos y materiales de la construcción, la actividad minorista retrocedió 0,6% anual en septiembre a valores constantes y 1% en la comparación intermensual. Si bien este mes fue más estable, los incrementos de precios continuaron pero con menos frecuencia y en porcentajes más reducidos que los registrado durante julio y agosto pasados. La situación relevada resulta bastante dispar entre comercios y productos.
Si bien septiembre suele ser un mes de baja actividad, pinturas y elementos para refacciones registraron mejores números que aquellos relevados por los materiales eléctricos.
Textil e indumentaria. Las ventas minoristas se derrumbaron 17% anual en septiembre y 1,3% en la comparación mensual. Fue el rubro de mayor retracción en el índice minorista de CAME. Es el quinto mes consecutivo en que sus indicadores caen. Además, en septiembre se registró el declive más importante del año. Las tiendas se están manejando con subas de precios interanuales por encima de 100%, lo que describe por qué la demanda se retrae tanto. Algunos comerciantes mostraron preocupación creciente por una tríada de elementos que se retroalimentan y que explican esta evolución: el aumento de la informalidad, la evolución de la venta online y la suba de precios. Aun así, las expectativas para octubre, noviembre y diciembre son alentadoras: Día de la Madre, el Mundial y las fiestas.