Daniel Funes de Rioja y Marcelo Uribarren insistieron en políticas que permitan sostener la actividad. Alertaron por el impacto del cepo a las importaciones. El dirigente local pidió “previsibilidad y consenso”. En tanto, el funcionario nacional resaltó la diferencia entre el reclamo y la ejecución. “No es lo mismo un power point que conducir”, dijo. Mientras, Schiaretti se diferenció de la Nación y anunció un nuevo programa de empleo.
El titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, y su par de Córdoba (UIC), Marcelo Uribarren, coincidieron en reclamar al Gobierno nacional medidas que despejen la incertidumbre y permitan sostener la actividad, al tiempo que resaltaron el aporte del sector privado como factor clave en cualquier escenario para sostener el crecimiento.
Por su parte, el secretario de Producción de la Nación, José Ignacio de Mendiguren, replicó a los dirigentes empresariales. Si bien admitió dificultades, pidió ponderar los avances logrados en el marco de una crisis global consecuencia de la pandemia.
El contrapunto se produjo ayer en el marco del 14º Coloquio Industrial, organizado por la UIA, que se desarrolló en un salón ubicado al sur de la ciudad capital.
Del evento también participaron el gobernador Juan Schiaretti y el intendente Martín Llaryora, como anfitriones. Entre los oradores invitados estuvo el jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, además de dirigentes políticos y economistas.
La apertura del coloquio marcó la línea con la que la entidad organizadora caracterizaría la tónica de la jornada: un video con imágenes de un barco sorteando un mar embravecido, con música de fondo que enmarcaba la épica del navío y su tripulación.
Inmediatamente después, Uribarren emuló el heróico avance del barco con el trabajo diario de los industriales para superar los múltiples problemas que afrontan en un contexto económico y político claves.
“Variables fuera de control, baja visibilidad, maquinaria sobreexigida, tripulación bajo estrés, peligro de naufragio. Ésta es, creo yo, la situación de las empresas hoy en la Argentina”, señaló.
“En medio de la tormenta, la UIC busca ser un punto de referencia, un instrumento para establecer un rumbo y llegar a puerto seguro. Es nuestra vocación institucional acompañar las empresas con buen o mal tiempo”, siguió, para luego comenzar a desandar su discurso.
Luego, Uribarren habló del rol institucional de la UIC y de su paso por la presidencia de la entidad, próxima a concluir.
Acto seguido, apuntó a la situación provincial y, si bien elogió diferentes medidas, instó a avanzar en una profunda reforma tributaria que termine con el impuesto a los Ingresos Brutos. También, en una solución de fondo al costo de la energía, convertir la matriz productiva en una política de Estado que perdure más allá de quien gobierne, mediante la publicación de una ley y, finalmente, la necesidad de que Córdoba se vincule a través de vías eficientes al Atlántico y al Pacífico.
En cuanto a la situación nacional, Uribarren fue muy crítico.
“Déficit fiscal, problemas gravísimos de financiamiento, falta de dólares para la producción, crisis sindical, de la Justicia, del oficialismo y de la oposición. En fin y en resumen: una economía achicada, asfixiada, llena de cepos, cupos y restricciones. Un país sin rumbo, sin una política de Estado que nos permita salir de tres enfermedades acuciantes: pobreza inaceptable, informalidad extrema e inflación sin control”, apuntó.
Con todo, ofreció toda la colaboración a la autoridades para encontrar salidas a los diferentes problemas.
Finalmente, habló de la necesidad de recrear la confianza y consideró clave alcanzar consensos para consolidar un rumbo que permita el desarrollo del país.
Por su parte, Funes de Rioja insistió en la necesidad de motorizar el diálogo para superar las dificultades que hoy afectan el sector industrial y que las ubican frente a una “contradicción” entre “las aguas tormentosas de la crisis y la fuerza del acorazado de la industria; cada uno buscará su identidad”.
El dirigente destacó el impulso de los industriales cordobeses para luego enumerar diferentes temas que preocupan al sector.
En ese sentido, reclamó trabajo genuino. “Ni subsidios ni supuestas fórmulas de autoempleo”, señaló, y habló de la dificultad de muchas fábricas para conseguir trabajadores porque, según indicó, muchos “no quieren estar registrados”.
En otro orden, aseguró que “todos los días estamos buscando soluciones para que no se pare la industria”, dijo.
Asimismo, recordó que el Libro Blanco de la UIA plantea propuestas para el desarrollo. “No es una escopeta, son sugerencias para que este país sea efectivamente federal”, espetó.
En paralelo, se refirió a la necesidad de recrear el diálogo, la certidumbre y la confianza, “asignaturas pendientes que la Argentina debe afrontar, a pesar de la grieta y para superar la grieta”, planteó.
De Mendiguren
Por su parte, el secretario de Industria De Mendiguren dijo que la economía del interior del país es la que “sale al rescate de Argentina”, al tiempo que admitió problemas para reducir la inflación y contar con las divisas necesarias para normalizar la economía. Rememoró la crisis de 2001 y las medidas tomadas para salir de esta coyuntura.
En ese sentido, pidió “no comprar” discursos de las personas que critican sin proponer soluciones. “No es lo mismo presentar un PowerPoint que conducir una política económica”, dijo. “Son pocos los que pueden demostrar éxito en materia inflacionaria”, consideró.
“No cabe ninguna duda de que en el Gobierno estamos con dificultades”, sostuvo, y luego mencionó los efectos de la guerra entre Rusia y Ucrania. “Estamos ante un momento complejo estructuralmente. Cerca de 4.600 millones de dólares le ha costado a la Argentina la guerra, no es una cifra menor”, graficó el funcionario. En la misma línea, recordó el esfuerzo del Estado para cubrir el impacto de la pandemia entre las empresas.
También dijo que en el Gobierno son conscientes de que la brecha cambiaria perjudica a la economía del país. Sin embargo, se mostró optimista: “Estamos abocados en bajar la inflación, lo vamos a poder hacer. Todos los días hay medidas que fomentan el crecimiento y las exportaciones a través de medidas como el lanzamiento del dólar ‘tecno’ o de alivio fiscal”.
En cuanto a la escasez de dólares, admitió el problema pero consideró que “hay otra Argentina que produce y genera un saldo favorable de la balanza comercial”.
Coloquio
Además de los dirigentes industriales, el coloquio contó con la participación del diputado de la UCR Facundo Manes y del mencionado Horacio Rodríguez Larreta.
Además, estuvieron los economistas Diana Mondino y Ricardo Arriazu, el periodista Sergio Suppo y un panel sobre “la adaptación tecnológica como faro del futuro” con tres jóvenes empresarios, todo enmarcado por la presencia de unos 600 invitados.