Tal como se sospechaba, los resultados de las autopsias practicadas a dos bebés que murieron a poco de nacer en el Hospital Materno Neonatal concluyeron que perdieron la vida como consecuencia de “exceso de potasio“. Asimismo, se confirmó que dicho exceso fue consecuencia de haber sido “inyectado de manera intencional“.
Los datos forenses corresponden a dos de los cuerpos de los bebés que fallecieron el 6 de junio pasado, que desencadenaron la investigación de otros casos similares.
Por el hecho, una enfermera se encuentra detenida desde el viernes en la cárcel de Bouwer. Aún no será indagada, según confirmó a Comercio y Justicia la fiscalía de Raúl Garzón.
Se espera que en los próximos días la mujer sea sometida a peritajes psicológicos y psiquiátricos con el objetivo de avanzar en la confirmación de la hipótesis de que hubo una intencionalidad criminal y no negligencia ni mala praxis.
Brenda Aguero, de 27 años, fue acusada de homicidio calificado y es una de las nueve personas empleadas del Hospital Neonatal que fueron apartadas de sus cargos cuando se hizo pública la situación la semana pasada, según una disposición del Ministerio de Salud provincial. La mujer prestaba servicios en el hospital desde diciembre de 2020 y no contaba con antecedentes de problemas laborales ni personales.
Otros imputados
Además, el fiscal Garzón imputó a tres ahora ex directivos del Neonatal -una de ellas la directora, Liliana Asís-, quienes se encuentran acusados por responsabilidades mediatas, vinculadas con su función, como la omisión de deberes de funcionario público.
En ese marco, ayer Garzón recibió a los abogados querellantes y representantes legales de los empleados del centro de salud público provincial donde ocurrieron las muertes.
Abrazo
Por otra parte, personal médico y administrativo realizó ayer un abrazo simbólico del Hospital Materno Neonatal. Los trabajadores se unieron en el pedido de justicia y esclarecimiento de la causa. De esta forma, mostraron su acompañamiento a las familias implicadas y pidieron “poder trabajar en paz”.
El acto se realizó en la explanada del hospital y tuvo una duración aproximada de 20 minutos. Se hizo un minuto de silencio y el personal médico evitó referirse a la detención de la enfermera implicada, aludiendo que eso está en manos de la Justicia.